Por Carlos Agurto

“Estoy a pocos meses de concluir el periodo de cinco años que la Ley Orgánica Constitucional establece para los presidentes del Banco Central. Creo que a pesar de que los últimos han sido años complejos, el trabajo conjunto del staff del Banco y de los miembros del Consejo ha contribuido a que hayamos cumplido con éxito nuestra misión. Les agradezco el apoyo que nos han brindado durante este periodo”.

Así, el presidente del Banco Central (BC), Rodrigo Vergara, culminó su presentación del Informe de Política Monetaria (Ipom) de septiembre, intervención que estuvo marcada por su alto contenido político, dando señales que sería la última antes de que el próximo 10 de diciembre deje la presidencia del instituto emisor y también el edificio de Agustinas 1180.  

La salida del presidente del BC, antes que culmine su periodo de consejero -que se extiende por diez años y finaliza en diciembre de 2019-, se explicaría por la casi segura elección del consejero Mario Marcel, economista cercano al Partido Socialista (PS), como su reemplazante.

De hecho, en el mercado advierten que la decisión de la Presidenta de poner a Marcel en su puesto, producto de un velado acuerdo que busca equilibrios políticos al interior del Consejo del ente rector, llevaría a Vergara a renunciar a su cargo de consejero  ante la “inconveniencia” de que una ex autoridad sea la sombra del nuevo presidente.  De hecho, no existen casos anteriores en que un líder del BC continúe como consejero tras dejar la presidencia ¿El ejemplo más cercano? La salida de Vittorio Corbo (Independiente) en 2007, luego que la Presidenta Bachelet en su primera administración nombrara en dicho cargo al economista (DC) José de Gregorio.

“El nombramiento del presidente del Banco Central es un tema de facultad exclusiva de la Presidenta de la República, por lo tanto, yo no me refiero a ese tema. Por ahora estoy dedicado 100% a mis labores y lo estaré hasta el último día de mi mandato. No tengo nada más que agregar al respecto”, dijo el propio Vergara al ser consultado por su futuro tras intervenir ante empresarios hace unos días en Icare.

Academia y política

Por esta razón la definición del camino que tomará el economista de la UC y PhD. de la U. de Harvard ya comienza a ser tema en el mundo económico y político. De hecho, en el mercado coinciden que lo más probable es que Vergara retome las actividades que ejercía hasta antes de asumir en el BC como profesor titular en el Instituto de Economía de la Universidad Católica.

Asimismo, otros dicen que además podría incorporarse al Centro Latinoamericano de Políticas Económicas y Sociales de la Pontificia Universidad Católica de Chile (Clapes UC), think tank liderado por el ex ministro de Hacienda, Felipe Larraín. Las mismas fuentes reconocen que este centro de pensamiento tendría en un futuro gobierno de Piñera un rol similar al asumido por Cieplan –presidida por el también ex ministro Alejandro Foxley- durante las administraciones de la Concertación.

De todas maneras, el énfasis del final de su presentación ante el Senado en la presentación del IPoM, dio señales que Vergara seguirá siendo un actor importante en el devenir político local en los próximos años. Fue al concluir dicha intervención donde se refirió a la capacidad de las políticas monetaria y fiscal para lidiar con el débil ciclo económico, justo antes que se inicie el debate de la Ley de Presupuesto 2017. “Creo que es pertinente hacerlo, pues, tras años de bajo crecimiento y en un contexto de crecientes demandas sociales, las presiones sobre ambas se han incrementado y la forma en que las enfrentemos será clave para el devenir de la economía y del país”, afirmó.

En esa línea, Vergara destacó la importancia de mantener una política fiscal “responsable”, lo que desde su punto de vista, ha permitido enfrentar este ciclo “sin mayores sobresaltos”. En este contexto, y refiriéndose claramente al programa de reformas que lleva adelante el actual gobierno, reconoció que su preocupación está en que “la acumulación de compromisos termine tensionando las finanzas públicas”.

 Al finalizar su presentación, parlamentarios de todas las bancadas reconocieron el legado del economista en el Banco Central. “Creo que ha hecho un trabajo propio de su cargo, lo ha hecho bien y creo que todo el mundo ha reconocido su labor como presidente”, admitió el senador DC y presidente de la Comisión de Hacienda, Andrés Zaldívar.

Del mismo modo, empresarios y economistas que asistieron al encuentro organizado por Icare el pasado jueves 8 de septiembre en Casapiedra también destacaron su gestión y el tinte político que tomó el final de discurso ante el Senado.

¿Un rol en Hacienda?

Por esta razón, no son pocos los que reconocen que Vergara estaría evaluando su incorporación a los grupos de trabajo que está conformando el ex presidente Sebastián Piñera para una futura campaña presidencial en 2017. De hecho, el también ex asesor del FMI, el Banco Mundial (BM), el BID y la ONU formó parte del comité económico de la primera candidatura del ex mandatario, instancia que también conformaban Felipe Larraín, Cristián Larroulet, Felipe Morandé, Juan Andrés Fontaine, Hernán Cheyre, José Ramón Valente y Raphael Bergoeing.

La participación de Vergara también pasó por coordinar las comisiones para la superación de la pobreza de los Grupos Tantauco, think tank creado por el ex mandatario para elaborar su programa de gobierno. Dicho paso llevó a pensar que durante la anterior administración ocuparía un cargo ministerial en alguna de las carteras de carácter social. Sin embargo, su nombre generó consenso para asumir como consejero del Central en 2009 con la promesa que en 2011 Piñera lo nominaría en reemplazo de José de Gregorio.

“Me parecería natural que se uniera (al equipo programático de Piñera) porque lo vi trabajando en su momento en este tema”, admite un destacado ex miembro de los Grupos Tantauco.

La experiencia del economista, que también se ha desempeñado como consultor de bancos centrales y gobiernos de Europa, África, Asia y América Latina, llevan a algunos a proponerlo para que sea el reemplazante de Rodrigo Valdés en Teatinos 120. “Creo que Rodrigo es una persona que tiene la trayectoria y los pergaminos suficientes para ocupar cualquier cargo en la esfera de la administración pública y de la economía del Estado. Sería un lujo contar con él”, comentó un importante dirigente de la oposición.

De esta forma, en Chile Vamos ven con muy buenos ojos que Vergara se incorpore a un futuro gobierno de Piñera, quien lo tiene en su carpeta junto a un selecto grupo de economistas como Klaus Schmidt-Hebbel o Rosanna Costa, para asumir como jefe de las finanzas públicas a partir de marzo de 2018, si llega nuevamente a La Moneda..

Lee también:

 

Publicidad