Las grabaciones de las cámaras del barrio de Almagro en Buenos Aires –expuestas en parte por la prensa argentina hace unos días- permitieron a la justicia argentina definir que solo una persona fue responsable del asesinato de la joven estudiante de intercambio chilena.
Fuentes judiciales trasandinas indicaron a la Agencia de Diarios y Noticias de ese país que las imágenes confirmaron un solo agresor, pero su baja calidad no les permitió identificarlo.
Hasta ahora se siguen manejando distintas hipótesis. Dos amigas brasileñas que vivían con la joven dijeron que la última vez que vieron a Nicole fue el lunes, cuando fueron a un local nocturno, y ella habría estado junto a un hombre desconocido.
Las cámaras sin embargo, la mostraron regresando sola a su casa en la madrugada del martes. Cuando la encontraron tenía todas sus pertenencias, por lo que se habría descartado un robo.
