Luego de que a principios de abril, la Comisión de Evaluación Ambiental de la Región Metropolitana, aprobara la Resolución de Calificación Ambiental para la construcción de la Línea 3 de Metro, 29 recurrentes presentaron dos recursos de reclamación.
Pero esta tarde, desde el Ministerio del Medio Ambiente (MMA), aseguraron que el Comité de Ministros competente, resolvió rechazar ambos reclamos.
El proyecto contempla una inversión de US$ 1.571 millones de dólares, con un trazado que se extenderá por seis comunas -Quilicura, Conchalí, Independencia, Santiago, Ñuñoa y La Reina-, cerca de 22 km y tendrá 17 estaciones, correspondiendo cinco de ellas a líneas de combinación.
Los dos recursos se basaron principalmente en cinco materias: deficiencias en el proceso de participación ciudadana, medio humano (criterios técnicos) y bienestar social básico (áreas verdes y arbolado urbano), ruido y vibraciones, calidad del aire y otras materias de carácter no ambiental (expropiaciones a Bienes Nacionales de Uso Público y ubicación de estaciones).
En su reunión, los expertos resolvieron rechazar las cuatro primeras materias, mientras que de la quinta no se pronunció, declarando que "al no ser de carácter ambiental excede sus competencias".
Respecto de la participación ciudadana, ruido y vibraciones, y calidad del aire, se estimó que los temas fueron abordados en el proceso de evaluación, y que “el proponente ha dado respuesta a las observaciones planteadas al proyecto y ha comprometido las medidas de mitigación, reparación y compensación para hacerse cargo de sus impactos”, consideraron.
En cuanto al medio humano y bienestar social básico, también se estimó que los reclamos fueron abordados y ponderados en el proceso de evaluación, y en particular “se verificó que el titular del proyecto realizó las predicciones y evaluaciones del impacto en flora, arbolado urbano y áreas verdes, y que ha propuesto las medidas de mitigación, reparación y compensación para hacerse cargo de dichos impactos”, aseguraron.
Sin embargo, el Comité de Ministros recomendó incorporar a la comunidad, a través de las juntas de vecinos y organizaciones sociales, a las mesas de trabajo que se implementarán entre municipio y Metro, “asegurando la participación de los vecinos en el plan de comunicaciones, el diseño arquitectónico de las estaciones en superficie, y el seguimiento al cumplimiento de la RCA en materia de Bienes Nacionales de Uso Público”, exigieron.
