Luego de varias semanas de enfrentamientos, combatientes islámicos del ISIS tomaron la base aérea militar de Tabqa, el último reducto del ejército sirio en la provincia de al-Raqqa. Según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, el domingo por la tarde, los militantes del ISIS lograron controlar el total de la base. Según la información del organismo la operación le costó la vida a más de 500 personas, 346 combatientes y 170 miembros de las fuerzas de seguridad del gobierno.
Las fuerzas del régimen habían repelido tres ataques anteriores sobre la base y ahora, según anunciaron, estaban lanzando ataques aéreos sobre los rebeldes. La provincia de al-Raqqa se ha convertido en el bastión del Estado Islámico, que controla la capital provincial, parte del autodenominado califato que alcanza territorio iraquí. En la base aérea capturada, el ISIS se hizo de armamento pesado y municiones.
Otra información surgida hoy sobre el ISIS, afirma que luego que estos tomaran la ciudad de Mosul en Irak en junio pasado, habría asesinados 670 presos detenidos en la prisión de la ciduad. Sólo se habría librados del ajusticiamiento los presos suníes.
