El crimen se registró cerca de las 23:00 horas del domingo pasado, en el sector de Rinconada, en la comuna de Maipú, donde el acusado apuñaló en el cuello a su suegro tras una discusión entre ambos por conflictos anteriores, provocándole la muerte.
La defensa sostuvo que el imputado actuó en su propia defensa al ver que el padre de su pareja lo atacaba con un hacha, argumento que forma parte de la investigación.
Sin embargo, el fiscal Luis Cortés Reyes desestimó estos dichos a raíz de las pruebas físicas halladas en el lugar. "La evidencia física encontrada en el lugar no es compatible con la versión del imputado, puesto que implicaría que la víctima hubiese tenido que recorrer un trayecto grande hasta el lugar en que finalmente cayó herida y sangrando".
"No hay ninguna evidencia de sangre en otro lugar que no sea el de la herida. Además, la dinámica de las manchas por predicción da cuenta que las heridas se propinaron prácticamente en el mismo lugar en que la víctima falleció", agregó.
Cabe destacar que el victimario tenía una orden pendiente por hurto simple, antecedente que bastó para que la magistrado decretara la medida máxima cautelar en lugar de la reclusión domiciliaria total.
