Un nuevo dispositivo, denominado tobillera o brazalete electrónico, podrá ser utilizado por hasta cerca de cinco mil condenados a reclusión parcial.
Así lo confirmó el ministro de Justicia, José Antonio Gómez, quien detalló que el monitoreo telemático podrá ser aplicado desde fines de agosto.
La medida solo se usará en quienes deban cumplir con reclusión domiciliaria, pues el dispositivo no funciona en el Metro ni tampoco en ciertos sectores del centro de Santiago.
El secretario de Estado descartó que las tobilleras puedan ser utilizadas por quienes hayan sido condenados a libertad vigilada intensiva, principalmente por delitos sexuales o violencia intrafamiliar.
Esto ya que tras una nueva etapa de revisión se pudo apreciar un porcentaje bajo de fallas, lo que podría poner en riesgo la integridad física de las vítctimas.
Gómez advirtió que solo cuando la tecnología sea mejorada se podría extender su uso.
¿Cómo funciona?
El pequeño dispositivo se coloca en las piernas del condenado y no puede ser retirado.
Los condenados deberán cumplir 56 horas semanales en un lugar determinado y el aparato -monitoreado por Gendarmería- advertirá cuando la persona sale del perímetro, el que no debe superar los 100 metros.
Las distintas pruebas a las que fue sometido indicaron, que además de los problemas en el Metro o en algunos lugares, también perdería su señal al ser envuelto con papel aluminio o entre edificios.
