¿Los semáforos están sincronizados para que las personas adultas mayores crucen las calles de Santiago con seguridad?, fue la pregunta que se realizó el kinesiólogo del Instituto Nacional de Geriatría, Rodrigo Espinosa y el terapeuta ocupacional Jaime Urzúa.
El estudio de los especialistas reveló que un 34% de ancianos no alcanza a cruzar la calle con luz verde, en el tiempo establecido por el semáforo.
Para evaluar el escenario, se midió en terreno la distancia del ancho de las calles en la capital y el tiempo de luz verde de distintos semáforos y se comparó con la velocidad de marcha de 101 adultos mayores – de un promedio de edad de 70 años- egresados de Hospital de Día del Instituto, los cuales fueron seleccionados a través de diferentes test.
Las mediciones de tiempo se realizaron a la hora en que los adultos mayores salen de sus casas a hacer trámites.
Según los autores de este estudio “existen limitantes en la comunidad que dificultan la deambulación de los pacientes provocando una mayor probabilidad de eventos adversos, es decir riesgo de caídas y fracturas”, advierten.
Por lo tanto, “resulta indispensable generar condiciones de infraestructura vial que permitan a los adultos mayores una convivencia segura y amigable con la ciudad”, agregan.
REALIDAD INTERNACIONAL
El problema de los cruces peatonales seguros está incluido en la Guía “Ciudades Globales Amigables con los Mayores”, difundida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que nace de un proyecto concebido en junio de 2005 en la sesión inaugural del XVIII Congreso Mundial sobre Gerontología en Río de Janeiro, Brasil. En esta investigación fueron consultados ancianos, cuidadores y servicios en diferentes ciudades del mundo.
Otro motivo de preocupación es el hecho que los conductores no respetan las señales de tránsito y no ceden el paso a los peatones.
Existen cruces peatonales, pero los conductores de vehículos “no respetan a los peatones”, según el catastro de la entidad internacional.
