El intendente Metropolitano, Claudio Orrego, recibió este lunes a las selecciones chilenas masculina y femenina, que el domingo se coronaron campeones del Mundial Fútbol Calle 2014.
Nuestro país fue sede de la XIII edición de este torneo, que se disputó entre el 19 y 26 de octubre justo al frente de La Moneda. Más de 40 países entre los que estuvieron Argentina, Brasil e Inglaterra, y cerca de 650 jugadores, disputaron esta copa del mundo, que por primera vez tuvo a un mismo país como triunfador en las categorías femenina y masculina.
En la definición de mujeres, la Roja se impuso por 4-3 a México, mientras que en la final de hombres el conjunto nacional venció por un categórico 5-2 a Bosnia Herzegovina.
Orrego realizó un homenaje a los jóvenes y manifestó que "tantas veces nuestro país ha discriminado a las personas y hoy quienes en el pasado pudieron ser discriminados fueron las estrellas, que nos llenaron de orgullo. El fútbol nos unió y demostró que no sólo sirve para mejorar la calidad de vida de las personas sino que muchas veces para cambiar la vida de las personas. Estos jóvenes son ejemplos de ese empuje, de esa garra chilena, y no solamente de superar al adversario sino que también de superar a las adversidades de la vida".
El evento contó con tres canchas por ocho días, 54 equipos - 42 de ellos masculinos y 12 femeninos - que disputaron la copa del torneo. El campeonato tiene como objetivo promover la inclusión y desarrollo de hombres y mujeres en situación de vulnerabilidad social. "El Mundial fue un gran desafío y a la vez una gran responsabilidad. Fue un trabajo muy duro, nos esforzamos mucho como organización y esperamos que la experiencia de toda la gente de distintos países sea inolvidable. Esperamos haber aportado con un granito de arena para que este hito en sus vidas haga un cambio y mejore su calidad de vida. Y qué mejor que las dos copas se hayan quedado en casa, fue un mundial redondo en ese sentido", dijo Rodrigo Izquierdo, director ejecutivo del Mundial Fútbol Calle.
Ismael Mariqueo, seleccionado nacional, calificó la situación como "hermosa, el fútbol calle dicen que te cambia la vida y a mí me la cambió. De que tus padres no se sintieran orgullosos y ahora que lleguen a la cancha con los ojos con lágrimas, porque uno hace goles. Increíble, y más por haber ganado la copa".
El joven deportista vivió una situación muy particular, ya que tras convertirse en campeón le pidió matrimonio a su polola frente a las cámaras de televisión que transmitían el partido. "Me la jugué toda, estoy enamorado de ella. Un mensaje a los cabros que el amor existe y que hay que hacer las cosas como corresponde", dijo.
La autoridad regional también tuvo palabras para comentar esta anécdota que se vivió tras conseguir la Copa: "Una palabra especial para el joven que se comprometió públicamente en matrimonio, que ya me ha invitado a ser su padrino, feliz lo acepto. Tendré que tener regalo acorde al padrinazgo, pero decirle que junto con jugar excelentemente bien al fútbol, fue muy valiente. No solamente por decirlo públicamente sino también por casarse, por comprometerse con su pareja y también con los hijos que vengan en el futuro".
Por su parte, Denisse Silva, capitana del equipo femenino, dijo que "siempre tuvimos en mente enfocarnos en un objetivo y como el Mundial era acá teníamos una responsabilidad mayor. Pero gracias a Dios se nos dieron las cosas y la copa quedó acá en casa. El fútbol es muy bueno no solamente para mí sino que para varias compañeras. Adquirí responsabilidad, disciplina, en especial del programa Fútbol Calle, ellos entregan valores muy importantes".
La Homeless World Cup fue fundada en 2001 por Mel Young de Escocia y Harald Schmied de Austria, bajo la fiel creencia que era posible "cambiar la vida de las personas sin hogar a través del Fútbol". El 2006 invitaron a Chile a participar en el mundial de la categoría en Sudáfrica, bajo el programa Fútbol Calle.
UPI
