Por Aldo Schiappacasse
La albiceleste no pierde en Chile por Copa América desde 1926 cuando Uruguay la derrotó por 2 a 0. Hoy los charrúas pueden derribar una marca que cumplió 89 años.
El profesionalismo en el continente era apenas un esbozo. Todavía no se construía el estadio Nacional, Pelé todavía no nacía y los viajes entre Buenos Aires y Santiago se hacían en tren. En 1926, la Copa América se llamaba Campeonato Sudamericano, y el 12 de octubre de ese año Uruguay le ganó 2 a 0 a Argentina con goles de René Borjas y Héctor “El Manco” Castro. Fue la última derrota de la albiceleste en una cancha chilena jugando por el torneo continental.
Han pasado 89 años y, desde ese día, Argentina ha jugado 24 partidos del torneo en Chile. Y nadie le ha podido ganar: registra 19 victorias y 5 empates (tres con Chile, uno con Perú y el del sábado contra Paraguay). Ha transcurrido casi un siglo y hoy Uruguay puede derribar la marca.
En total, acumula la impresionante marca de 22 triunfos, siete igualdades y un solo revés, considerando su participación en las ediciones de 1920, 1926, 1941, 1945, 1955, 1991 y el estreno ante los guaraníes.
Mascherano lo dijo fuerte y claro en Brasil: “estoy harto de comer mierda”. No gana un trofeo continental desde 1993 y no levanta una Copa del Mundo desde 1986. Aún lamentan la derrota con Alemania en la final y con una larga sequía a cuestas, Argentina quiere volver a celebrar en Chile, tierra fértil para la consagración trasandina: acá ganó cuatro de las seis ediciones anteriores (1941, 1945, 1955 y 1991). Y fue segunda en las dos primeras: terminó invicta en 1920 y perdió con la Celeste en 1926.
Pero si hay un equipo especialista en borrar sueños ajenos es la selección charrúa. Hoy en La Portada estará en juego mucho más que los tres puntos.
