La acusación lanzada en un reportaje del prestigioso semanario alemán Der Spiegel tiene preocupadas a las autoridades del fútbol alemán. De acuerdo con la revista, el comité que trabajó en la candidatura para la organización del Mundial de 2006 contó con una “caja negra” que disponía de dineros con los que se habría comprado los votos de cuatro delegados asiáticos en el comité ejecutivo de la FIFA.
Este lunes el presidente de la Federación Alemana de Fútbol (DFB, por sus siglas en alemán), Wolfgang Niersbach (en la foto), negó las acusaciones. “La Copa del Mundo de 2006 fue un sueño de verano y sigue siendo un sueño de verano. El sueño de verano no está destrozado porque aquí, repito, no hubo ‘caja B', no hubo compra de votos”, dijo el dirigente en el nuevo Museo Alemán del Fútbol de Dortmund.
Sin embargo, reconoció -como ya hizo la DFB en un críptico comunicado antes de que reventase el escándalo- la existencia de “un punto abierto” en la cuestión de “para qué se empleó esa transferencia de 6,7 millones de euros”, en referencia al dudoso pago de la federación a la FIFA en que se basa la noticia. “Para nosotros también sería deseable que se aclarase lo antes posible”, dijo Niersbach al respecto.
Solo queda creerles
Niersbach se remitió a que las investigaciones están en curso tanto a nivel interno dentro de la DFB, como externo en manos de un prestigioso despacho de abogados. Pero pronto todo este asunto podría pasar también a manos de la Fiscalía, luego de que Nadja Nielsen, portavoz de la oficina en Fráncfort, anunciara que, como procedimiento previo de evaluación, podría abrirse un caso por el posible delito de fraude, prevaricación o corrupción.
El impulsor de la candidatura alemana y presidente del comité organizador, el “Káiser” Franz Beckenbauer, negó el domingo que estuviese al tanto de la presunta “compra de votos”, y este lunes el presidente del Consejo Directivo del Bayern Múnich, Karl-Heinz Rummenigge, salió a defender tanto a Beckenbauer como a Niersbach, señalando que ambos “han asegurado de forma creíble y seria que las informaciones no son ciertas. No hay para mí otra opción que creerles”, aseguró.
Alemania obtuvo en julio de 2000 la organización del torneo, tras una votación que se saldó con 12 votos para su candidatura frente a 11 para Sudáfrica y una abstención.
