Dos referentes del balompié sudamericano abandonaron la liga germana sin terminar de cumplir las promesas que habían surgido en torno a ellos. Adrián Ramos había emocionado con su desempeño en el Hertha, pero desde que se cambió a Dortmund quedó relegado al banquillo de sustitutos.
El colombiano hizo las maletas y partió rumbo a Granada, en un movimiento que seguro le regalará más minutos, pero que se antoja como un retroceso en su carrera pues el equipo, donde también milita el mexicano Guillermo Ochoa, está hundido en el fondo de la clasificación de la liga española.
Eduardo Vargas también termina marchándose de Hoffenheim, donde nunca llegó a cuajar, contrastando con las buenas actuaciones que ha tenido con su selección. El chileno llegó para reforzar al actual campeón de la liga mexicana, Tigres de Monterrey, donde también juega el francés André-Pierre Gignac.
Probablemente el chileno gozará también de mayor protagonismo en el cuadro felino, pero si bien Tigres es un club con una realidad muy diferente a la del Granada, dejar la Bundesliga por la Liga MX tiene que verse más bien como un paso hacia atrás.
Solo un latino
El único refuerzo latinoamericano que llegó a territorio germano durante el mercado invernal fue Andersson Ordóñez. El ecuatoriano tomó una ruta opuesta a la de Ramos y Vargas, dejando al Barcelona de Guayaquil, actual campeón del torneo local, para incorporarse al Fráncfort.
Las "águilas” de Hessen podrían aparentar un retroceso para un jugador que acaba de coronarse campeón. Pero Niko Covac y compañía están haciendo bien las cosas en esta campaña y su realidad es diametralmente opuesta a la de los últimos años. Lejos de luchar por no caer al infierno de segunda, prueban las mieles de los puestos altos de la tabla y clasificarse a la próxima Champions no resulta en absoluto descabellado.
El nuevo defensor albinegro podría tener poca actividad para lo que queda de este certamen, pues en su equipo todo funciona a pedir de boca y Vallejo, Hasebe y Abraham tienen amarrado su lugar en la defensa del cuadro. Pero es muy probable que en seis meses sea uno de los nombres que aparezcan en la lista de titulares.
Del baile a la discreción
En general, la actuación de los latinoamericanos fue más bien discreta durante esta primera mitad de la competición. Si bien Marco Fabián dejó los momentos difíciles y se ha convertido en referente del Fráncfort, Jhon Córdoba sigue afianzado en la titularidad con el Maguncia, lo mismo que los chilenos Arturo Vidal (FC Bayern) y Charles Aránguiz (Leverkusen), ninguno fue considerado entre el cuadro ideal de la Bundesliga y no gozan del protagonismo que antes podían presumir.
Javier Hernández, que había logrado tal hazaña en la temporada de su debut, cayó en la peor sequía goleadora de su carrera, mientras que el propio Vidal, que también se colocara entre la élite de los mejores de Alemania durante el torneo anterior, terminó siendo superado en la lucha como mejor medio central por su compañero de equipo Thiago.
