Más alllá de lo que pasó en la cancha, donde Colo Colo derrotó por 1 a 0 a la Universidad de Chile y extendió su buena racha de 18 años en el Estadio Monumental, el Superclásico del fútbol chileno jugado el sábado pasado sigue generando polémica.
Tal como ocurre con frecuencia en este tipo de partidos, las barras bravas se hicieron protagonistas al comienzo del segundo tiempo cuando una serie de fuegos artificiales lanzados desde la zona norte del estadio hicieron que la cancha se cubriera de humo y el desarrollo del partido se retrasara. También fue lanzada una bengala que por poco le llegó al portero azul Johnny Herrera.
Una de las primeras en condenar las acciones fue la intendenta de la Región Metropolitana Karla Rubilar, quien anunció que "evaluaremos legalmente la sanción".
Este lunes, y tras se interpelada por el jugador Jorge Valdivia, la autoridad regional aseguró que "he recibido gran cantidad de insultos/amenazas por no tolerar lo ocurrido en el Monumental. Algunos prefieren atacarme en vez de criticar grave comportamiento de su 'barra brava'".
"Defenderemos seguridad en el fútbol a todo evento, como es mi atribución, sea donde sea y del equpo que sea", agregó Rubilar, quien es hincha de la Universidad de Chile.
Poco antes del tuit de Rubilar, el mediocampista colocolino Jorge Valdivia la había interpeldo: "Señora intendenta, si se quiere meter en el fútbol no es su terreno. Si quiere erradicar la violencia en los estadios preocúpese de verdad, si se quiere preocupar solo del estadio Monumental, sáquese la camiseta".
"Pedir cerrar el estadio Monumental solo estaría dándole la razón a la delincuencia", remató "El Mago".
Rubilar también emplazó a la ANFP, Colo Colo y a Universidad Católica "a decir si no he tenido la mejor de las relaciones por un buen funcionamiento del fútbol".
