Los hechos de violencia del pasado domingo en el Estadio Sausalito de Viña del Mar trajeron varias consecuencias.
Como suele pasar, los clubes, autoridades de gobiernos y ANFP se echaron la culpa entre ellos sobre quién es responsables que acontezcan estas lamentables acciones.
Las alusiones van y vienen. Pero, en resumen, ¿Qué decisiones se tomaron?
Aforo reducido
El intendente de la Quinta Región, Ricardo Bravo, dispuso que el partido entre ambas escuadras involucradas para este domingo tuviera un aforo máximo de 8 mil personas (Recordando que la capacidad del estadio Elías Figueroa es de 23 mil personas).
Sin ruleteros
Las autoridades porteñas determinaron que el duelo de este domingo a las 12 horas por la tercera fecha de la Copa Chile se juegue sin público visitante.
Sausalito suspendido
Otra decisión que se tomó es que el estadio Sausalito de Viña del Mar, que brillara en la Copa América, debido a los incidentes no podrá ser ocupado.
"Hemos resuelto que momentáneamente no se podrá ocupar Sausalito para este tipo de partidos hasta que se cumplan los requisitos mínimos necesarios para que se entreguen las condiciones de seguridad y contener el comportamiento de algunas barras", aseguró el intendente porteño Ricardo Bravo.
Multas y demandas
También Bravo agregó que Everton recibirá multas: "habrá una serie de multas al organizador por el incumplimiento en la cantidad de guardias, en la cantidad de equipos para la detección de metales y en el proceso de control de identidad, lo que hubiese evitado el ingreso de personas con antecedentes".
Por último, el gobernador de Valparaíso Omar Jara estableció una querella para encontrar responsabilidades. "Vamos a solicitar que exista una identificación de las personas que ingresaron al estadio con la finalidad de sancionarlas".
