El uso del lenguaje homofóbico, machista, sexista y misógino parece ser una práctica arraigada y normalizada entre las hinchadas de los clubes chilenos de fútbol.
Y es que en el Superclásico 183, donde Colo Colo le ganó por 3-1 a la Universidad de Chile, frases alusivas a denostar al rival utilizando el género femenino, o cánticos homofóbicos, “adornaron” el ambiente del desarrollo del partido.
No solo eso, durante el viernes 13 de abril, dos días antes que se desarrollara el partido, los hinchas azules acudieron al Estadio Nacional a dar el “banderazo” y entonaron cánticos como "indio maricón".
Por su parte, al día siguiente, en el “arengazo” realizado en el estadio Monumental, los hinchas del cuadro albo cantaron: "porque esa copa ya la tiene su papá y nadie más, madre".
Sin embargo, no son instancias aisladas, pues los hinchas en todo el país reproducen cánticos que aluden al género femenino como símbolo de inferioridad semana a semana.
La representante de la Red Chilena Contra la Violencia hacia las Mujeres, Yoselin Fernández, atribuye este tipo de prácticas a un reflejo de "una sociedad machista, donde la violencia contra las mujeres se ve en lo cotidiano (...) El fútbol no está fuera de eso y es un espacio más de reproducción de violencia".
En ese sentido, en entrevista con T13.cl, Fernández apunta que los cánticos machistas, homofóbicos, misóginos o sexistas son un problema que "está arraigado profundamente en los hinchas y es algo súper difícil de transformar en corto plazo".
La secretaria de la Asociación Nacional de Jugadoras de Fútbol Femenino (Anjuff), Javiera Moreno, profundiza señalando a este medio que "es la visión que tienen de la mujer dentro del fútbol, como un lugar que se nos es prestado. Como un accesorio".
Ante eso, los apodos de los clubes aparecen como el punto de partida de la diferencia entre lo masculino como superior y lo femenino como símbolo de lo denigrante.
Lo femenino, sinónimo de insulto
Es reconocido que los aficionados enaltecen la figura de su equipo con apodos identificados en lo masculino. “El León”, “El Cacique”, “El Decano”, “El Pirata” o “El Capo de Provincia”, aparecen como referencias de los algunos clubes del fútbol chileno.
Sin embargo, a la hora de referirse a sus rivales, utilizan el género femenino para denigrar la identidad contraria.
De esa forma, “las zorras”, “las monjas” o “las madres”; aparecen como los “apodos” que se utilizan para los aficionados de Colo Colo, Universidad Católica y Universidad de Chile, respectivamente.
Ante esa costumbre, la representante de la Red Chilena, Yoselin Fernández, apunta que “es importante que los mismos hombres, que han hecho del espacio del fútbol un espacio tan masculino, se puedan hacer cargo de eso y ellos mismos ir alentando a que se den cuenta de las cosas que están diciendo".
Espacio de reflexión que se ha ido dado con el tiempo, pues existen iniciativas para erradicar los cánticos que utilizan al género femenino como sinónimo de denigración.
La Asamblea de Hinchas Azules, por ejemplo, en 2016 partió por el llamado a eliminar la muletilla “en pelota” durante la entonación del himno de la Universidad de Chile.
Por su parte, a mediados del 2017, en el estadio Monumental se evidenció la campaña de redes sociales #NoMasMuletillas, cuyo objetivo era eliminar obscenidades y frases despectivas contra el género femenino por parte de la barra alba.
“Son pequeñas actitudes que van modificando cómo se sienten las mujeres en el espacio del fútbol”, asegura Yoselin Fernández.
Y añade que “con todo el ejemplo de la Copa América, también se empieza a pensar el fútbol en un espacio donde las mujeres también pueden habitar; desde el periodismo deportivo, desde la cancha, desde la dirigencia, desde ser hincha”.
El rol de la prensa y los mismos clubes
“Colo Colo aumentó su paternidad” o “En su casa manda papá… y en la otra también”, fueron algunos de los titulares que se leyeron en la prensa escrita tras el triunfo del cuadro albo frente a la U.
Para la representante de la Anjuff, Javiera Moreno, la prensa juega un rol fundamental en el arraigo de la manera que se ve el rol de la mujer en el ámbito futbolístico.
“Los medios reproducen su mirada política y ‘sigue la paternidad’ es, obviamente, la posición machista que transmiten al público”, apunta y añade que lo hacen producto de que es algo “que vende”.
Sin embargo, la misma Javiera Moreno quita peso a esa premisa de los medios, pues, para ella, ha quedado demostrado que las mujeres ligadas al futbol sí generan convocatoria; por ejemplo, con la Copa América femenina, que se desarrolla en Chile, que ha impulsado a la afición a repletar el estadio La Portada de La Serena, donde la selección ha hecho de local.
Por otro lado, y respecto al rol de los clubes, la representante de la Red Chilena Contra la Violencia hacia las Mujeres, Yoselin Fernández, señala que el tema de los cánticos y cómo se comprende la figura de lo femenino dentro del fútbol es algo a lo que hay que poner más atención.
Pues, para ella, es un tema del cual se está problematizando dentro del fútbol y no por nada la FIFA ha impuesto castigos a la ANFP por cánticos homofóbicos, en algunos cotejos disputados por Chile en las clasificatorias mundialistas.
En ese sentido, la secretaria de la Anjuff, Javiera Moreno, señala que hay “que empezar a educar desde niño que la mujer también está inserta en esto; también puede jugar y con eso empezar a dar paso a la diversidad”.
Además, profundiza que la primera tarea la deben cumplir los clubes debería partir por integrar a los planteles femeninos de manera seria y constante al desarrollo de la institución.
Ante lo mismo, aborda la presentación de las casaquillas de los planteles al inicio de cada temporada. “Las camisetas los hombres la presentan los jugadores (…) la indumentaria que las jugadoras ocupan fin de semana a fin de semana las utilizan modelos, siendo que podría presentarla una jugadora”, comenta.
“Es todo parte de una cadena. Mientras el club no integre, las barras o la afición no va poder conocer al femenino y van a seguir en este círculo”, concluye.
