¿Quién dijo que en el tenis femenino no se aprecian momentos como este?
Claro, andar rompiendo raquetas presos de la ira parece ser una conducta que ocurre con más frecuencia en los varones, pero a veces las damas también ponen de su parte.
Tras un desastrozo comienzo de partido, en el que se puso 0-5 en contra, la local Coco Vandeweghe no aguantó la ira y comenzó a azotar a golpes su raqueta a vista y paciencia de los asistentes al Abierto de Estados Unidos.
En ese momento la tenista comenzó a recibir la reprobación del público asistente debido a su actuación y, peor aún, se paró de su silla con actitud desafiante para seguir azotando su herramienta de trabajo.
De poco le sirvió...El triunfo sería de todas formas para su rivla Betahnie Mattek-Sands por parciales de 6-2 y 6-1.
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