La NFL, que dirige los destinos del Football Americano en Estados Unidos, decidió este martes en una reunión anual de dueños de equipos las sedes de los Super Bowls del 2019, 2020 y 2021.
Los Ángeles recibió el derecho a organizar el Super Bowl del 2021, mientras que Atlanta lo haría en el 2019 y Miami en el 2020. Las ciudades anfitrionas se dieron a conocer después de una votación en la reunión anual de dueños de la NFL.
La elección de Los Ángeles había sido ampliamente anticipada tras la decisión de la NFL a principios de este año por el traslado de los St. Louis Rams a la nueva metrópolis californiana.
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La candidatura de Los Angeles fue dirigida por Casey Wasserman, el empresario de la ciudad que también es presidente de la candidatura de la metrópoli para los Juegos Olímpicos de 2024.
"Es un honor que la NFL está trayendo el Super Bowl a Los Angeles en 2021", dijo Wasserman en un comunicado, en el que rinde homenaje a la inversión del propietario de los Rams, Stan Kroenke, por el nuevo estadio del equipo.
En tanto, la edición LIV 2019 del Super Bowl se llevará a cabo en un estadio de 1,5 millones de dólares, adonde los Atlanta Falcons se moverán en el 2017.
Nueva Orleans y Tampa se encontraban entre otras ofertas no seleccionados que habían estado esperando ser sede de un Super Bowl.
El evento del próximo año se llevará a cabo en Houston, mientras que en el 2018 el Super Bowl LII se jugará en el nuevo estadio de los Minnesota Vikings.
