El tenista norteamericano Mardy Fish, quien animó la histórica final de Juegos Olímpicos de Atenas ante Nicolás Massú y que terminó con un inolvidable triunfo del chileno, anunció su retiro del deporte blanco.
El estadounidense terminó con calambres y al borde del llanto su match, donde cayó ante el español Feliciano López en la segunda ronda del Abierto de los Estados Unidos.
Su adiós hace recordar la ascendente carrera de Fish, que se vio truncada al vivir ataques de pánico en este mismo torneo en el año 2012.
El tema fue retratado por el artículo publicado en The Player's Tribune, que indicó que “el estadounidense enfrentaba el mayor partido de su vida y relata el porpio protagonista ‘Cuarta ronda del Abierto de los Estados Unidos, en el día del cumpleaños de mi padre, en el estadio Arthur Ashe, televisado por CBS, contra Roger Federer’".
"Estoy a horas de jugar contra el mejor de todos los tiempos, con la posibilidad de conseguir el mejor resultado de mi vida, en mi torneo favorito. Estoy a horas de jugar el partido por el que todos trabajamos, por el que nos sacrificamos, y no puedo hacerlo. Literalmente, no puedo hacerlo", explicaba el tenista.
"Me estoy volviendo loco. Mi esposa está preguntándome: '¿Qué puedo hacer? ¿Cómo podemos hacer que esto mejore?'. Y le cuento la verdad: 'La única cosa que puede hacerme sentir mejor ahora mismo es la idea de no jugar este partido'", agregaba Fish aquejado por una crisis de pánico.
A finales de 2012 se sometió a una intervención quirúrgica, pero en su regreso los nervios no desaparecieron.
Desde ese incidente Fish apenas disputó quince partidos: nueve en 2013 y seis en 2015 escribiendo esta jornada su despedida del tenis.
