No se sabe el lugar exacto, ni se conoce el nombre de quien fue. Solo es seguro que en Estados Unidos, hace 30 años, alguien desembolsó 3.995 dólares (precio equivalente a más de 5 millones de pesos actuales) para comprar el Motorola DynaTac 8000X, el primer teléfono celular portable.
En ese tiempo, ya existían los teléfonos de auto, inventados unos 40 años antes, pero no se comparaban con el nuevo dispositivo, que podía ser llevado a cualquier lugar.
El DynaTac medía unos 33 centímetros y pesaba casi un kilo, además su batería duraba solo media hora. Rápidamente, sus mismos creadores lo bautizaron como el “ladrillo”.
En esos tiempos, el teléfono de auto dominaba el mercado. Sin embargo, no pasó mucho tiempo para la extinción de esos aparatos y una revolución causada por los “portables”, que hoy además son inteligentes.
La evolución del celular es innegable, pero cada día las tecnologías parecen avanzar más rápido en esta materia, dejando obsoletos aparatos de solo meses de antigüedad.
Hoy, después de una clara tendencia hacia los tamaños pequeños, casi parece como si los teléfonos quisieran volver a ser grandes, aunque no tanto como el Motorola DynaTac 8000X.
Mira el comunicado de prensa que introdujo el teléfono móvil al mercado:
