Luego de la condena regional contra el gobierno de Maduro, producto de la breve detención que sufrió el recién asumido presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó. La Administración del país sudamericano negó tener conocimiento de la operación, por lo que manifestaron que el Gobierno no ordenó la detención del político.
"Sabemos que hubo una situación en la que un grupo de funcionarios actuaron de manera unilateral y realizaron un procedimiento irregular", dijo el ministro de Comunicaciones, Turismo y Cultura, Jorge Rodríguez. Y agregó que los oficiales del servicio de inteligencia SEBIN "están siendo despedidos y sometidos a un procedimiento disciplinario más estricto", además rechazó la difusión de información falsa, a la vez que denunció la instalación de "falsos positivos”. Dijo que todo esto forma parte de un "show mediático" que busca alterar "la paz de la República".
Después de su liberación, Juan Guaidó fue recibido por cientos de simpatizantes en el mitin político al que se dirigía cuando fue interceptado en una carretera por hombres armados y encapuchados en dos vehículos del servicio de inteligencia venezolano, según relató su esposa.
"¿Quién está al mando del régimen ahora? Si ya están admitiendo que no controlan las agencias de seguridad del estado, hay un problema grave en Miraflores", dijo Guaidó al dirigirse a los asistentes al cabildo abierto convocado por la oposición.
Guaidó había cuestionado directamente la legitimidad de Maduro cuando el presidente juró por un segundo mandato el jueves, llamando al día siguiente a un gobierno de transición antes de celebrar nuevas elecciones.
Maduro fue reelegido en mayo en una votación que fue boicoteada por la oposición, a cuyos líderes más conocidos se les prohibió postularse. El resultado fue ampliamente criticado por el fraude y la intimidación de los votantes, y Estados Unidos, la Unión Europea y la Organización de los Estados Americanos se negaron a reconocerlo. Maduro, sin embargo, retiene el apoyo del alto mando militar, que le reiteró su lealtad al asumir su segundo mandato.
