"Rusia debe dejar de bombardear a las poblaciones civiles de Siria para que la situación en aquel país puede avanzar", dijo también este sábado (13.02.2016) Manuel Valls, durante la Conferencia de Seguridad de Múnich, que se celebra a lo largo de este fin de semana en el país bávaro.
"Francia respeta a Rusia y a sus intereses", continuó Valls, dirigiéndose a su homólogo ruso, Dmitri Medvedev, "pero, para encontrar la voz de la paz y del diálogo, deben cesar los bombardeos sobre civiles". Valls secunda así la voz de Hollande, el presidente francés, que ya había hecho esta advertencia a Rusia hace dos días. Por otro lado, describió como "una certeza" la posibilidad de nuevos ataques terroristas en Europa. "Habrá ataques a gran escala. Es una certeza. El hiperterrorismo ha llegado para quedarse." Como solución, Valls propone una "respuesta colectiva" frente a esta amenaza: "Necesitamos un plan de seguridad europeo". Según el primer ministro francés, el mundo se encuentra ahora en una "nueva era", en la que hay una "guerra contra el terrorismo" global yihadista, al que hay que "combatir" porque "afecta al fundamento de nuestras sociedades."
También advirtió Valls de una posible "desaparición" del proyecto europeo si no se toman las políticas adecuadas: "El proyecto europeo puede sufrir un retroceso e incluso desaparecer si no lo cuidamos", dijo Valls. "Si Europa no demuestra que es capaz de responder, ya no solo a los retos económicos, sino también a los de seguridad, el proyecto europeo terminará, porque la gente ya no lo querrá."
Medvedev: "Estamos ante una nueva Guerra Fría"
Por su parte, el jefe de Gobierno ruso, Dmitri Medvedev, describió la relación entre Rusia y los países occidentales como una "nueva Guerra Fría". "Hemos ido cuesta abajo a los tiempos de una nueva Guerra Fría", valoró el mandatario ruso, según la traducción simultánea de sus palabras durante el coloquio de la Conferencia de Seguridad de Múnich en el que también participó Manuel Valls. "Las relaciones entre la Unión Europea y Rusia están estropeadas", agregó Medvedev.
Por otra parte, Medvedev aseguró que Rusia no tiene "intereses ocultos" en sus bombardeos sobre Siria y que solamente "protegen sus propios intereses". Además, insistió en que su país no bombardea a civiles y que nadie puede demostrar lo contrario.
