Un tenso momento se vivió en los funerales del ex presidente de los Estados Unidos, George H.W. Bush, que se realizaron este miércoles en Washington.
En la ceremonia estuvieron presentes los ex presidentes Jimmy Carter, Bill Clinton y Barack Obama, estos últimos dos acompañados por sus esposas, la ex candidata presidencial Hillary Clinton y la ex primera dama Michelle Obama.
Fue cuando la misa ya había empezado que apareció en escena el Presidente Donald Trump y la primera dama Melania Trump, quienes se acercaron a mostrar sus respetos a la familia Bush. Posteriormente, se sentaron en primera fila en el mismo lugar en el que estaban los Obama, Clinton y Carter.
Allí, ocurrió la polémica. Si bien Melania saludó a todos de mano a excepción de Hillary Clinton, Jimmy Carter y su esposa Rosalynn, a quienes saludó con una señal debido a la distancia, distinto fue el caso de Trump, quien únicamente saludó al ex presidente Obama y su esposa, con mirada bastante seria ambos y sin cruzar miradas en ningún momento con los Clinton.
Cabe recordar que esta inesperada reunión se da en momentos en que Trump mantiene una crispada relación con las familias Obama y Clinton.
La esposa de Barack Obama lo criticó públicamente en su libro autobiográfico señalando que nunca "lo perdonará" por haber puesto en peligro la seguridad de su familia con "sus insinuaciones ruidosas e imprudentes", haciendo referencia a las acusaciones que hizo sobre que su marido no era estadounidense.
En tanto, la relación con la ex candidata presencial es tensa debido a la serie de acusaciones que se han emitido cada uno en el marco de la investigación por la trama rusa y al hackeo que sufrió el correo de la candidata demócrata, situación por la que la Fiscalía de Estados Unidos ya ha imputado a 12 agentes rusos.
