La alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Federica Mogherini, expresó su "grave preocupación" sobre el respeto del Estado de derecho en China tras las condenas emitidas el martes contra los activistas chinos de derechos humanos Wu Gan y Xie Yang.
El derecho de ambos bajo la ley de procedimiento penal china a un juicio justo, una defensa apropiada y un acceso rápido a representación legal "no fue respetado", indicó en un comunicado una portavoz de Mogherini.
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Pidió en ese contexto que el derecho de Wu a apelar sea garantizado y que las autoridades chinas "investiguen también las alegaciones de tortura" contra él. "Quien sea hallado responsable debería ser juzgado de acuerdo con la ley", apuntó.
Al mismo tiempo, la portavoz de Mogherini reiteró la preocupación de la UE por la detención prejudicial desde hace más de dos años del jurista Wang Quanzhang, al que "se le ha venido denegando acceso a su familia o a un letrado de su elección".
Wu ha sido condenado a ocho años de prisión culpado del difuso delito de subversión contra el poder del Estado -la sentencia más dura en los dos años y medio que dura la campaña- mientras que Xie, condenado por la misma causa, ha sido eximido de la pena de cárcel tras confesar su culpabilidad.
Xie, Wu, Wang y otros cientos de abogados y activistas fueron detenidos en el verano de 2015 en la conocida como "campaña 709" contra estos colectivos.
Según grupos de derechos humanos y miembros de la comunidad internacional, la campaña es un recurso del régimen comunista para eliminar toda voz crítica con el gobierno del presidente chino, Xi Jinping.
