El presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello, dijo este lunes que las fuerzas de seguridad venezolanas detuvieron a 27 soldados tras el alzamiento militar contra el Gobierno de Nicolás Maduro registrado a primeras horas de esta jornada en la zona de Cotiza, donde numerosos ciudadanos salieron a las calles para apoyar a los sublevados.
De acuerdo con Cabello, 25 uniformados fueron capturados en una instalación de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) en el norte de Caracas por un cuerpo de las Fuerzas de Acciones Especiales, mientras que los otros dos fueron apresados en un lugar que no precisó. En conferencia de prensa, Cabello añadió que es posible que sigan ocurriendo detenciones.
Las autoridades venezolanas identificaron como líder del grupo rebelde al sargento mayor de tercera de la GNB Alexander Bandres Figueroa. Cabello dijo que la operación de captura fue "absolutamente limpia” y valoró que las fuerzas de seguridad lograran controlar en tiempo "récord” la sublevación, sin que hubiera que lamentar pérdida de vidas humanas.
Oscuros intereses de la derecha
Según la versión del Gobierno, los soldados robaron armas y tomaron como rehenes a varios oficiales de la GNB. Un sargento grabó un video llamando a la ciudadanía a apoyarlos. Por medio de una declaración leída en televisión, el Gobierno aseguró que "las Fuerzas Armadas rechazan categóricamente este tipo de acciones, muy probablemente motivadas por los oscuros intereses de la extrema derecha".
Lo ocurrido este lunes parece ser una señal de la creciente tensión que se vive en Venezuela, en especial desde que el 10 de enero Nicolás Maduro asumiera su segundo mandato ante el desprecio de buena parte de la comunidad internacional. El presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, llamó a las Fuerzas Armadas a respetar la Constitución y ofreció inmunidad a quienes se alzaran contra el Gobierno, que el Poder Legislativo (de mayoría opositora) considera ilegítimo.
