“Le digo a la Fuerza Armada: aquí está llegando la hora de la verdad, de decidir si usted está con la Constitución o usted está con Maduro. Esa será una decisión que le corresponderá a la FANB (Fuerza Armada Nacional Bolivariana) tomar”, dijo el líder opositor venezolano Henrique Capriles después de que el presidente Nicolás Maduro decretara el estado de excepción y emergencia económica el pasado 13 de mayo.
En opinión del politólogo Wolfgang Muno, de la Universidad de Maguncia, el hecho de que se apele al Ejército -una organización genuinamente apolítica- como mediador o portador de esperanza para evitar una escalada de la crisis venezolana “pone de manifiesto la debilidad de las instituciones políticas y democráticas, así como la polarización social”.
Oposición pide un “golpe de Estado”
Asimismo, señala que, al pedir que las FF. AA. adopten una postura en el conflicto, la oposición básicamente les está exigiendo que den “un golpe de Estado”. “El Ejército podría efectuar directamente un golpe de Estado o imponer ciertas medidas amenazando con un golpe. Ambas cosas evidenciarían el fracaso de los actores políticos”, explica Muno en entrevista con Deutsche Welle.
El politólogo alemán señala que el Ejército venezolano no es un actor neutral, sino uno de los “pilares del chavismo”. El expresidente Hugo Chávez se habría asegurado la “doble lealtad” de los militares, repartiendo puestos importantes a sus seguidores y ofreciendo cargos civiles a los uniformados. De ahí que el Ejército trate de conservar sus privilegios. No obstante, también quiere evitar una guerra civil. El levantamiento popular de 1989 fue una experiencia dramática para los soldados, que se vieron obligados a dispararle a civiles. En aquel entonces el llamado "Caracazo" cobró la vida de hasta 3.000 personas.
¿Está dividido el Ejército?
Por su parte, el presidente del Parlamento de Venezuela, Henry Ramos Allup, sostiene que generales del alto mando aseguraron que no reprimirán a los opositores en caso de estallidos populares. En un mensaje de Twitter, el político opositor escribió además que “existe un fuerte rechazo interior de las Fuerzas Armadas ante el decreto del estado de excepción”.
¿Está dividido el Ejército ante el manejo de la crisis nacional por parte de Maduro? “Hay una infinidad de especulaciones al respecto. De momento es muy difícil saber qué es lo que pasa en Venezuela dentro de las FF. AA. Los militares han sido los más favorecidos por Maduro. Eso hace pensar que están a favor de la continuidad del Gobierno. No obstante, puesto que es tan evidente que Maduro está llevando el proyecto a la destrucción, se especula que en las FF. AA. hay gente que está descontenta y a la que le gustaría ver un referendo en el que salga derrotado Maduro”, dijo a DW David Smilde, especialista en Venezuela de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericano (WOLA).
El asesor principal del think tank estadounidense agrega que los uniformados probablemente preferirían que el referendo revocatorio se celebre después del 10 de enero de 2017, porque, en ese caso, el vicepresidente completaría el mandato presidencial. “Entonces podría haber continuidad del chavismo, pero sin Nicolás Maduro al frente”, explica.
Planes para invadir Venezuela son “absurdos”
Recientemente la Fuerza Armada Nacional Bolivariana realizó amplios ejercicios militares ordenados por el presidente venezolano para prepararse ante una eventual invasión extranjera. Según el politólogo Wolfgang Muno, se trató de una maniobra de distracción por parte del Gobierno, ya que los supuestos planes de la OTAN para invadir Venezuela “son completamente absurdos e irreales”.
Por otro lado, el experto cree que a raíz de la crispada situación “tarde o temprano pasará algo” en el país sudamericano. Muno, que acaba de regresar de un viaje a Cuba, cuenta que incluso los cubanos le dijeron que solo es “una cuestión de tiempo”.
