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[Interactivo] El avance del cambio climático en lagos, lagunas y embalses de Chile

[Interactivo] El avance del cambio climático en lagos, lagunas y embalses de Chile
Emilio Ramírez
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T13.cl te invita a realizar un recorrido por lagos, lagunas y embalses de Chile que han reducido su capacidad en 32 años.

El desorden de las estaciones, la prolongación de sequías y el aumento de la temperatura pueden ser parte de las transformaciones del cambio climático en Chile y en distintos lugares del mundo.

Un estudio publicado este año en IOP Science comprobó el progreso de la temperatura de la Tierra desde la década del 70, viéndose niveles históricos en los últimos tres años (2014 a 2017), siendo los más cálidos registrados por la humanidad.

En los últimos días, el cambio climático se ha tomado la agenda. Esto luego que el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara el retiro del Acuerdo de París sobre el cambio climático y reducción de gases invernaderos. Una decisión que ha generado rechazo en líderes internacionales e incluso se ha tomado la campaña presidencial en Chile, luego que el precandidato de Chile Vamos, Manuel José Ossandón, dijera desconocer el Acuerdo.

T13.cl te invita a realizar un recorrido por lagos, lagunas y embalses de Chile que han reducido su capacidad en 32 años. 

Un tema de escasez en el norte

Sumado a los factores de temperatura más cálida también están las lluvias, las que han tendido a tener mayores desórdenes en los últimos años, generando escasez hídrica en gran parte del norte y centro del país.

Un ejemplo de aquello es el gran retroceso que ha vivido el Embalse La Paloma, ubicado en el sector de Monte Patria, 27 kilómetros al sureste de la ciudad de Ovalle, Región de Coquimbo. Las imágenes de a continuación son una comparativa de su capacidad hídrica en diciembre de 1984 y diciembre de 2016.

bPara Fernando Santibáñez, director del Centro de Agricultura y Medio Ambiente (Agrimed) de la Universidad de Chile, en la zona norte “siempre vamos a estar hablando de escasez de agua, porque la variabilidad del clima en esa zona es muy alta. Un año puede llover suficiente y después pueden venir dos o tres años con menor lluvia, que provocan estas crisis hídricas. Eso no va a desaparecer, al contrario, se va a exacerbar”.

“Hay zonas que no van a tener las mismas cantidades de producción agrícola que antes y que probablemente por sus condiciones, no tendrán la misma capacidad de agua. Una de las principales consecuencias de eso puede ser la migración de población desde esos lugares a otros con mayores capacidades de agua”, dice Sebastián Vicuña, director del Centro de Cambio Global de la Universidad Católica, respecto a los mayores cambios que puede haber en la zona del norte chico. 

Laguna Aculeo y Lago Peñuelas

Las situaciones críticas de algunos cuerpos de agua de la zona central también parecen correr peligro. Este año, vecinos de Aculeo y autoridades del lugar advirtieron sobre la posible desaparición de la laguna del mismo nombre, que hoy presenta solo 80 centímetros de profundidad.

La imagen comparativa muestra sus niveles de diciembre de 1984 en relación a diciembre de 2016.

Misma relación se hace con el Lago Peñuelas, ubicado en la salida de Valparaíso. La reducción de su nivel de agua se ha acrecentado por mayores niveles de sequía, así como también por su intervención, ya que la presencia de mayor población y urbanización en el lugar peligran en parte su entorno natural, que está protegido como Reserva Nacional.

Cambios en el sur de Chile

La menor presencia de agua y temperaturas más elevadas también han afectado al sur del país. Veranos con mayor prolongación y menor cantidad de milímetros de agua por precipitaciones son parte de los factores inmediatos. Entre algunos cambios se puede destacar las variaciones que han vivido los conjuntos de agua de parques nacionales, como el Lago Conguillío, en la Región de La Araucanía.

La imagen compara su composición hídrica en 1984 y en 2016.

Las lluvias y los aluviones

Otro de los fenómenos que últimamente han afectado a la zona norte y centro del país son variaciones en la isoterma y la mayor precipitación liquida en los niveles más altos de la Cordillera de Los Andes, donde usualmente cae nieve. Esto ha provocado desde mayores aluviones y hasta cortes de agua en ciudades importantes, como Santiago.

¿Estos fenómenos son síntomas del cambio climático?

“Las lluvias, en conjunción con niveles altos de temperatura y por lo tanto, isotermas más elevadas, se podrían asimilar con cierta efectividad a un escenario de cambio climático. Eso se entiende de manera bien fácil porque aumentan los niveles de temperatura en la tierra. Lo que se denomina "tormentas cálidas" debiesen aumentar en el proceso”, señala Sebastián Vicuña director del Centro de Cambio Global UC.

Fernando Santibáñez, director de Agrimed, por su parte, advierte que “la lluvia se junta con que la isoterma cero sube, que se supone que podría subir unos 300 metros durante las próximas décadas, lo que significa que habría menos retención de agua, por parte de la Cordillera. El agua escurriría más rápido desde la cordillera hacia el valle, provocando más riesgos de avalancha”.

Un acuerdo que se pone en duda

La salida de Estados Unidos en 1 de junio del Acuerdo de París complica las aspiraciones de la ONU y otras naciones de mantener estándares adecuados para que la generación de carbono no aumente en el mundo. Esto ha generado que otras naciones reticentes al acuerdo (como China y Rusia) extrapolen sus decisiones de mejorar los estándares ambientales de sus industrias.

¿Qué es específicamente el Acuerdo de París?

  • Uno de los puntos importantes de este acuerdo es no elevar la temperatura mundial, entre las 193 naciones adscritas, más allá de 2° grados celsius en relación a los promedios actuales.
  • Aumentar las medidas de amortización al efecto invernadero, creando soluciones sustentables en generación industrial y energética.
  • Que los incrementos financieros sean compatibles con niveles de crecimiento e inversiones en medidas sustentables y neutralizadoras de los gases de efecto invernadero, además de que eviten contaminación por CO2.
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