El jefe de la zona Este de la Región Metropolitana, general Enrique Bassaletti, ha tenido semanas arduas con la muerte del Cabo Galindo y el asesinato de una mujer tras un robo en La Reina.
Bassaletti señaló que “se está trabajando sobre las cuatro directrices que nos impartió el general director (Hermes Soto): la modernización organizacional, la descentralización, fortalecer el análisis criminal y una mayor transparencia. Y para avanzar en esto hay que mirar qué ocurre hoy”.
Según informa La Tercera, el jefe de zona explica que existe una mayor violencia en el actuar criminal y que según El observatorio de homicidios del Departamento de Análisis Criminal de Carabineros (DAC): “Demuestra un cambio en el uso de la violencia, expresado por el uso de las armas de fuego, en la proporción del uso del instrumento para cometer el homicidio. Hace cinco o seis años el arma de fuego se usaba en un tercio de los homicidios, y hoy estamos hablando de que en un 47% de los crímenes existe el uso de estos armamentos”.
El asesinato del Cabo Óscar Galindo alertó sobre el uso de armas de alto calibre en manos de narcotraficantes. Respecto al origen de las armas que utilizan los delincuentes, Enrique Bassaletti señala que “Muchas veces las armas que están en manos de delincuentes provienen de un mercado legal, ocupando a una tercera persona que no tiene antecedentes, que pasa el examen que exige la ley, y luego se la revenden a bandas criminales por el doble o el triple de su valor".
Sobre los valores que tienen las armas en el mercado negro, Bassaleti dice que: "Hemos conocido casos donde un arma que cuesta $ 800 mil pesos, luego se vende en $ 4 millones. Usted comprenderá que un narcotraficante no tiene problemas en pagar eso”.
