Los cuatro comuneros acusados de quemar una iglesia en Padre Las Casas en 2016, depusieron su huelga de hambre el mes pasado luego de que el gobierno se comprometiera a retirar la querella por Ley Antiterrorista en su contra.
Sin embargo, dos de ellos, los hermanos Pablo y Benito Trangol, reanudaron su huelga acusando al gobierno de "incumplimiento". Un tercero, Ariel Trangol, nunca dejó su huelga de hambre, mientras que Alfredo Trancal no se ha sumado a esta nueva manifestación.
"El gobierno ha cumplido institucionalmente de acuerdo a sus facultades con todo aquello que ha comprometido en este caso", aseguró este viernes la ministra vocera de gobierno, Paula Narváez.
Pese a que el gobierno recalificó la querella, la fiscalía no modificó su calificación del delito y continúa investigando el caso como de carácter terrorista.
"Nosotros lamentamos la medida de huelga de hambre, creemos que es una medida tremendamente riesgosa, que pone en riesgo la vida de las personas", agregó la vocera.
Además emplazó a los comuneros a deponer "este tipo de medidas" y aseguró que el gobierno estará "supervigilando su situación de salud que es lo más importante en este momento".
