El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) entregó un informe sobre el Sename, que analiza la situación en la que viven los menores de edad dentro de los distintos establecimientos.
Entre los muchos temas que se abordaron se encuentran algunas prácticas de cuidado como la alimentación de las niñas, niños y adolescentes.
Sobre este punto se encontró que en la mayoría de los establecimientos los menores de edad consumen entre 3 y 4 comidas al día, pero preocupa el 1,6% de los centros donde los niños comen solo 1 a 2 comidas diarias. Dentro de ese porcentaje, esta situación ocurre en el 3,4% de los establecimientos donde hay lactantes y pre escolares.
Otra situación preocupante que ocurre en los centros relacionado con las comidas que reciben es que el 16,1% de los entrevistados dijo pasar hambre.
Algunos testimonios recogidos señalan que las porciones de comida son insuficientes, pasan hambre o que la comida es “mala”, lo cual, explican en el informe del INDH, que puede afectar gravemente su desarrollo y salud.
“Los más grandes (13 años) indican que quedan con “hambre”, que no es suficiente la comida, y que casi nunca reciben leche. Pasan mucha hambre ya que no les dan desayuno y deben esperar hasta las 10:00 horas en el colegio para poder tomar colación, esta situación es grave, puesto que la última comida que reciben es la cena a las 18:30 horas”, explican en el informe liberado.
Según los testimonios, la gran cantidad de horas de ayuno provocó en dos niñas problemas graves: una bajó 6 kilos de peso y otra vomitó en la escuela producto de la fatiga. Una niña embarazada también dice pasar hambre.
Desde el Instituto señalan que los mejores resultados se observaron en los temas que tienen relación con las necesidades más básicas de cuidado como son vivienda, vestuario y alimento, pero deben ser mejorados para cumplir con los derechos de los niños y niñas.
