El sector exportador, especialmente el agrícola, ha observado con atención los últimos movimientos de la divisa norteamericana debido a la baja en su valor por el repunte demostrado en el precio del cobre, que durante estos días ha bordeado los US$3 la libra.
Según El Mercurio, afirman que siguen dentro de los márgenes razonables para el impulso del sector, pero que eso puede cambiar si el fenómeno de caída se profundiza. Para Ronald Brown, presidente de Asociación de Exportadores de Frutas (Asoex), dijo que "el impacto de un menor valor del dólar es claro: menores retornos de exportaciones en pesos, lo que por ahora no afectaría de manera importante a nuestro sector, por ser un período de bajos volúmenes de envíos".
Felipe Sandoval, presidente Salmón Chile explicó que las bajas de la divisa estadounidense "siempre afectan", y que el sector también está "en un 70% dolarizado en costos". "Tiene un efecto en una parte de los costos en relación con la venta. El efecto depende de cómo sean los contratos con las empresas, cómo calculan el tipo de cambio para las ventas", acotó.
Luis Schmith, presidente de la Federación de Productores de Fruta (Fedefruta), advierte que "todavía tenemos un dólar bastante adecuado, pero si ya empezamos a hablar de algo del orden de $600 se empieza a complicar". "Los empresarios van a pensar dos veces, porque las inversiones se demoran entre cuatro y cinco años para mostrar resultados", agregó.
En la misma línea, si bien Ricardo Ariztía, presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), afirmó que los agricultores "ya están acostumbrados a vaivenes del tipo de cambio", y que es parte de una economía abierta y globalizada, no obstante, si el dólar baja de los $600, los sectores más afectados podrían ser los cereales, como el maíz y el trigo, que tienen cultivos anuales.
