Al cierre de 2014, la preocupación de las empresas se centró en los temas relativos al crecimiento económico, los que fueron reconocidos como los más desfavorables para el desarrollo de la actividad privada.
Así lo arrojó el informe de preocupaciones empresariales realizado por el Departamento de Estudios de la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), que mostró que en el cuarto trimestre el 21% de las firmas encuestadas identificó la incertidumbre respecto de la economía local como el factor más desfavorable, mientras que otro 14% apuntó al debilitamiento de la demanda.
"Este nuevo orden de tensiones es consistente con el enfriamiento del ciclo en 2014 y la prevalencia de débiles expectativas para 2015, que mantendrían el crecimiento económico sustancialmente bajo su potencial", explicó el organismo.
En tanto, la tensión proveniente del tipo de cambio subió en el último trimestre, abarcando el 19% de total de menciones (14% en septiembre). Esto es "coherente con la mayor volatilidad a la que ha estado sometido este precio y los cambios que se avecinan en las políticas monetarias".
Por su parte, los tópicos regulatorios registraron un 16% del total de menciones, muy por debajo de las cifras cercanas al 30% de los dos trimestres previos, y que estuvieron muy influidos por la Reforma Tributaria. No obstante, pese al recorte, la preocupación por los temas regulatorios permanece sustancialmente por sobre su promedio histórico (4%).
De acuerdo a la CCS, si se considera en forma agregada, las menciones por las tensiones ligadas al ciclo económico (incertidumbre económica interna, nivel de demanda y dificultades por la competencia) el cuarto trimestre marca un "nítido máximo" de los últimos años, tras alcanzar un 43,8%. En septiembre esta medición fue de 35% y en plena crisis de 2009 este porcentaje alcanzó a 41%.
Y agregó que este aumento está distanciado de aquel que se relaciona con la percepción de crisis o focos de inestabilidad en la economía internacional, ya que el porcentaje de menciones se mantuvo en un piso de 1,2%, muy lejos del 25% que tuvo durante el período 2011-12, durante la crisis en la zona euro.
La preocupación según tamaño
Según tamaño de empresa, se aprecia que la principal preocupación de las grandes firmas proviene de la incertidumbre económica interna (30% de las menciones), seguida de lejos por el tipo de cambio (18% de las menciones) y las reformas en el marco regulatorio (11%).
Mientras que en las firmas de menor tamaño, la tensión por la incertidumbre económica interna alcanzó una intensidad menor (15% en las medianas y 20% en las pequeñas), mostrando, en cambio, mayores aprensiones por aspectos que afectan su rendimiento económico-financiero, como lo es marco regulatorio, específicamente el proyecto de reforma laboral en trámite legislativo (20% de las menciones), el nivel de demanda y la competencia.
