Tras la acusación por colusión que la Fiscalía Nacional Económica (FNE) presentó contra seis navieras, la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), aseguró que de ser estos hechos efectivos son "graves" y "condenables".
A través de una declaración resaltó que "la libre competencia debe ser respetada sin excepciones", ya que garantiza a las personas el acceso en "igualdad de condiciones a los distintos productos y servicios", maximizando así "el bienestar de los consumidores y de la sociedad en general"
Además, destacó la importancia de que las empresas que detecten faltas contra la libre competencia cometidas por su propia organización, "utilicen los mecanismos legales vigentes para poner los antecedentes en manos de la autoridad competente, de modo que se investigue y se apliquen las sanciones en caso que corresponda".
Esto en relación a que el cartel, que aseguraba a cada naviera la mantención de sus contratos vigentes con los fabricantes o concesionarios, fue revelado por la CSAV mediante el procedimiento de delación compensada, al cual también se acogió la japonesa Nippon Yusen Kabushiki Kaisha (NYK).
El organismo pidió multas totales cercanas a los US$75 millones para las empresas, donde están la Compañía Chilena de Navegación Interoceánica (CCNI); a la coreana Eukor Car Carriers Inc. (Eukor); y a las japonesas Kawasaki Kisen Kaisha (K-Line), Mitsui O.S.K. Lines Ltd. (MOL). Sin embargo, solicitó eximir de multas a CSAV y respecto de NYK solicitó una multa equivalente a 50% del mayor monto solicitado al Tribunal.
