El analista político y experto en comunicación estratégica, Juan Carvajal, conversó con Mesa Central este 13 de mayo, sobre los dos primeros meses de gobierno desde que Sebastián Piñera retornó a La Moneda.
Respecto a la compleja semana que el ejecutivo debió afrontar, producto de la polémica del ministro de Hacienda, Felipe Larraín, aseguró que “los gobiernos son como un campo minado. Están llenos de posibles conflictos”.
En ese sentido, apuntó que si bien se ha intentado corregir el conflicto, el daño a la imagen ya está hecho.
Sin embargo, asegura que hay una diferencia sustancial con respecto a la administración anterior de Sebastián Piñera; esta, en materia comunicacional. “Hay una decisión previa de que él no se exponga mucho comunicacionalmente”, señala.
Además, añade que “no está improvisando sobre el esquema (comunicacional) de preparación que se tiene” y añade que “hay diseño, pero falta la capacidad de unir factores que están dispersos”.
Sobre lo mismo, puntualiza que este esquema de trabajo que posee el gobierno estaba planificado hace tiempo. Sin embargo, puntualiza que uno de los errores del ejecutivo es gobernar unicamente en torno a las encuestas. “La tarea de los gobiernos es saber leer la realidad que se está instaurando”, asegura.
“La tarea de los gobiernos es saber leer esta realidad (sobre manifestaciones)” y que él, particularmente, incorporaría “el tema feminista como política de gobierno y sobre todo en la discusión”.
Pese a lo anterior, apunta que este gobierno, por la gran votación que sacó, puede aspirar a lograr un segundo mandato consecutivo.
Sin embargo, señala que el fraccionamiento y crisis en algunos de los partidos de centro izquierda , más que ser una ventaja para el ejecutivo, puede resultar más complejo a la hora de legislar.
¿Tercer gobierno de Michelle Bachelet?
Juan Carvajal, además, abordó el presunto interés de Michelle Bachelet para ser parte de la agenda. Y es que el analista político fue considerado como la “mano derecha” comunicacional de la ex mandataria en parte de su administración.
“Lo posible de entender es que ella está muy preocupada de que su obra tenga un lugar en la memoria histórica”, asegura.
Y es que parte de las discusiones que se dieron en la administración anterior han sufrido modificaciones, o han estado envueltos en polémica –como el protocolo de objeción de conciencia sobre el aborto en tres causales-
“Algunos cambios se han caído por sí solos, como el caso de la reforma educacional”, asegura.
Sin embargo, y pese a los intentos de Michelle Bachelet para defender su “legado”, señala que “lo recomendable para los ex presidentes es guardar un retiro para permitir renovar fuerzas”. Sin embargo, señaló que “no creo que Bachelet esté buscando un tercer mandato”.
“Es súper prematuro pensar en nombres o escenarios presidenciales. El acontecer político está en una fase distinta”, añade.
Cambio que, según él, está estrictamente ligado a la derrota de la ex Nueva Mayoría en la elección pasada. “Tengo la convicción de que surgirán lideratos nuevos”, apunta.
“La figura del estadista terminó. El último fue Ricardo Lagos”, asegura y añade que “quién fuera el derrotado en las elecciones pasadas iba a entrar en una crisis profunda (…) ese efecto se dio en los partidos de la Nueva Mayoría”.
“El que sobrevivió mejor a la derrota fue el Partido Socialista”, concluye.
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