El ministro de Hacienda Felipe Larraín enfrenta una de las situaciones más complejas desde que asumió su cargo, a partir del cuestionado financimiento de su viaje a Boston, sin embargo asegura que tiene "toda la tranquilidad" y "espera tranquilo y confiado" el dictamen de Contraloria, según manifiesta en conversación con El Mercurio.
Hace sólo dos meses que asumió en la cartera y Larraín fue acusado por una bancada de diputados del Partido Socialista, sobre el cuestionado financiamiento fiscal que recibió por un viaje a Boston en donde participó en un encuentro de ex alumnos de la Universidad de Harvard, el mes pasado. Los antecedentes fueron presentados a Contraloría General para que investigara la "presunta falta de probidad" del ministro.
Sobre la situación, el ingeniero de 60 años expresó que posee "la tranquilidad total de que he actuado bien y de buena fe" ya que espera "tranquilo y confiado el dictamen de Contraloría". Además señaló que "la austeridad no significa que los ministros tengamos que quedarnos cerrados en Chile".
Felipe Larraín argumenta que su viaje fue "como ministro de Hacienda" y agregó que fue una actividad "tan pública (...) que salió en los diarios de Chile".
Según el abogado que lleva la querella, Luis Mariano Rendón, el viaje a Estados Unidos “ha producido una pérdida al patrimonio público de cinco millones 167 mil 194 pesos, suma a que ascienden los gastos de pasaje y viáticos”. A pesar de ello, el ejecutivo ha respaldado el viaje a Estados Unidos.
En cuanto a las discusiones sobre la Reforma Tributaria y el presupuesto de 2019, él cree que no quedó debilitado políticamente y que no debería "determinar este tema".
