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Cazador ruso fue devorado por un oso que crió desde que era un cachorro

Cazador ruso fue devorado por un oso que crió desde que era un cachorro
Sebastian Valdes
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Una vecina se percató de la desaparición del hombre y dio aviso a la familia, que cuando llegó al lugar se encontró con la terrible escena.

Un cazador fue asesinado y "devorado hasta los huesos" por un oso pardo que crió desde que era un cachorro. El violento incidente ocurrió en la ciudad de Ozyrosk, en la región de Chelyábinsk, Rusia.

Según indica The Sun, la historia comenzó hace cuatro años, cuando Sergey Grigoryiev decidió quedarse con un pequeño oso que encontró. Lo bautizó Vorchun, que significa "Gruñón" en español, y decidió criarlo en su casa, ubicada en un terreno suburbano en el centro de Rusia.

Durante todos esos años, Grigoryiev mantuvo al oso en un galpón, donde lo alimentaba y cuidaba, a pesar de que sus amigos le insistían en que debía deshacerse de él, pues temían por su seguridad.

En una oportunidad, Sergey recibió una oferta de una "estación de carnada" que quería quedarse con el oso, pero rechazó la propuesta, pues esos lugares son conocidos en Rusia por su crueldad: ahí son entrenados perros de caza con depredadores vivos, para que los canes aprendan a matarlos.

Los años pasaron y un día una vecina de Sergey se preocupó, pues hace días había compartido un té con él y desde entonces no lo veía. La mujer dio aviso a la familia, que llegó hasta la zona rural y se encontró con una terrible escena: el oso suelto y un rastro de sangre en la nieve.

Un perro que acompañaba a la familia atacó al oso y les dio tiempo para que escaparan en auto y llamaran a la policía, que acudió al lugar y encontró los restos del esqueleto de Sergey Grigoryiev, de 41 años.

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"La jaula estaba abierta. El animal caminaba por la zona en actitud agresiva. Y en el lugar encontramos los restos del esqueleto de un hombre", dijo el detective Alexey Petrov, en un comunicado reproducido por el Daily Mail.

Los oficiales también se percataron que el oso se había comido al perro, que dio su vida por la familia, y que también había devorado a uno de los canes de Grigoryiev. 

Los policías no fueron capaces de controlar a la bestia y tuvieron que dispararle: "La policía usó las armas para matar al peligroso animal. El oso no representa más un riesgo para la población", agregó el detective.