Brutus está regresando a la vida de un perro común. Luego de ser amputado de sus cuatro extremidades cuando solo era un cachorro, el rottweiler de dos años está reaprendiendo a caminar gracias a unas patas de acero diseñadas por OrthoPets, un desarrollador de prótesis animal de Denver.
Sus problemas comenzaron cuando el antiguo dueño de Brutus lo dejó fuera de la casa, y por culpa de las bajas temperaturas sufrió de daño extremo por congelamiento.
Laura Aquilina, su actual dueña, lo cuidó durante siete meses hasta encontrarle una solución a su problema, y junto a un rescatista de mascotas recaudaron $12 mil dólares a través del proyecto de crowdfunding "Mejores Patas Para Brutus"; y la mujer lo adoptó recientemente para continuar con sus cuidados.
El perro, que hoy vive junto a Aquilina en Loveland, fue el segundo can en recibir sus cuatro extremidades ortopédicas, y de a poco está recuperando el paso, además de servir para explorar nuevas tecnologías de desarrollo de prótesis.
