El ex ministro de Hacienda durante el Gobierno de Eduardo Frei, Manuel Marfán, se mostró crítico con el desarrollo de las reformas por parte del gobierno.
Quien fuera también consejero del Banco Central entre 2003 y 2013, dijo en "Mesa Central" de Tele13 Radio 103.3 FM que la reforma tributaria estaba dada en el marco de una aplanadora política sobre la lógica económica y que "había como un formato definido que tenía una buena argumentación política con que todos estábamos de acuerdo (...) Pero cuando uno piensa aumentar los impuestos, piensa que se aumente de una manera que haga el menor daño posible".
En esta línea, el ex jefe de las finanzas públicas declaró que "el aumento de impuestos no fue bien pensado".
Respecto a la reforma educacional, señaló que "junto con ampliar las oportunidades y ayudar a las familias en que la próxima generación sea mejor que la que está, a la vez hay que tener un capital humano que sirva para crecer".
"La educación superior gratuita es una demanda gremial de los estudiantes (…) La petición de un gremio es que siempre la plata sea para mí", prosiguió.
Política y economía
Respecto a la conformación del gabinete de la presidenta Michelle Bachelet, donde Rodrigo Peñailillo y Alberto Arenas abrieron como ministros del Interior y Hacienda respectivamente, señaló que "tengo la impresión que la estructura que se pensaba en el gobierno era con un ministro de Hacienda que no tuviera el peso que había tenido históricamente en Chile".
En este sentido, agregó que originalmente en esta administración, "se pensó en que Hacienda no fuera un freno del cumplimiento de los sueños".
Respecto al rol que jugarán los actuales titulares de Interior y Hacienda (Jorge Burgos y Rodrigo Valdés), confía en que resuelvan el mal clima interno, pues "la forma es con cierta coherencia y consistencia entre lo que es una lógica política y la lógica económica. En momentos difíciles la lógica económica tiene mucho más peso".
"Los buenos gobiernos han tenido una buena coordinación entre la cabeza política y la cabeza económica. Da la sensación que antes teníamos una aplanadora de la lógica política sobre la económica y eso es malo. Cuando pasan esas aplanadoras, vienen las resacas que es como tsunami que es terrible. Y cuando la económica lo hace, pasa lo mismo", comentó.
