Durante esta mañana de miércoles, la Iglesia Católica chilena dio a conocer el texto "Cuidado y esperanza", una guía de la Conferencia Episcopal para tratar casos de abusos sexuales a menores cometidos por sus integrantes.
Desde Estados Unidos, Juan Carlos Cruz, uno de los demandantes de Fernando Karadima, conversó con Tele13 Radio.
Antes de analizar el documento en cuestión, expresó en tono sarcástico: "Me encanta como ellos van y dicen 'esto desde ahora va a ser así'", porque "Juan Barros o Francisco Javier Errázuriz, según el criterio de ahora, no deberían estar trabajando en la Iglesia porque encubrieron todo, nos consta judicialmente. Eso es lo increíble, el problema no son las guías es la actitud frente al problema y el absoluto desdén que han tenido con las víctimas", agregó.
Ese es el juego de la dinámica del poder de la Iglesia, en palabras de Cruz, los que han hecho daño son recompensados y los que han hablado son silenciados.
Labor pastoral y cuidado de la víctima
En uno de los puntos del documento, se manifiesta que debe cuidarse a la víctima desde la primera denuncia.
"Eso mismo ellos lo tienen escrito desde el 2003, y tú ves como han actuado. Espero que en esta no sé cuánta versión se lo tomen en serio, porque de mí el cardenal Errázuriz dijo 'este es gay, le gustaba, este no cuenta como víctima'. Es bien tremendo", aseguró.
Juan Carlos Cruz habla a diario con otras víctimas que le escriben y dice que es un sufrimiento muy grande, porque ellos también han vivido lo mismo, en término de acogida, de la frialdad, y de cómo la Iglesia "se ha preocupado primero de encubrir en vez de dar la mano y ayudar a alguien que ha sufrido un vejamen que no tiene nombre".
Documento "Cuidado y Esperanza"
"Es un paso y es importante que se dé. Dar esa noticia crea responsabilidades también en la Iglesia, que la gente se dé cuenta que haya protocolos", comentó.
"Tiene sus cosas buenas, pero lo que me impresiona es cómo la Iglesia se queja. Este señor Cristián Contreras que es muy bueno para sacarle el poto a la jeringa, se quejaba de cómo la credibilidad está por los suelos; pero cómo no si ellos siguen no sacando este cáncer. Nunca van a poder avanzar si es que ellos no limpian a la Iglesia. A todos los que vieron, supieron de los abusos y los encubrieron", aseveró.
Eso sí, Cruz dijo que confía tanto en los sacerdotes como en las religiosas buenas que hay, "y toda la gente que trabaja y va a la Iglesia. Hay que tener esperanza que esa gente es la que tomará el poder".
