
1.500 soldados peruanos comenzaron intensas diligencias en una selvática zona de Cusco, en donde un grupo de Sendero Luminoso mantiene secuestrados a un grupo de 36 trabajadores.
Para afrontar la situación el gobierno del Presidente Ollanta Humala, decretó estado de emergencia y constituyó un comando unificado de Fuerzas Armadas y la Policía para realizar los operativos del caso.