La crisis por los estudiantes desaparecidos en México se acentúa y amenaza con crispar aún más los ánimos. Esto luego de que se conocieran nuevas informaciones que generan un vuelco en el misterioso caso.
El fiscal general que lleva el caso confirmó que las pruebas de ADN obtenidas de los cadáveres hallados en fosas comunes indican que los 28 cuerpos no corresponden a los 43 estudiantesdesaparecidos en la localidad de Iguala, en Guerrero.
El anuncio abre aún más interrogantes de un caso que ya lleva 19 días de pesquisas y medio centenar de detenidos, la mayoría policías.
El enigma principal ahora es el paradero de los jóvenes. Sin embargo, para las familias abre también la esperanza de que estén secuestrados con vida en las montañas de la zona.
