El Papa Benedicto XVI sigue en México para continuar con su agenda, en la cual está contemplada una reunión con el presidente Felipe Calderón y un encuentro con niños. En su llegada el Pontífice condenó el narcotráfico y aseguró que rezará por las víctimas.
En el mensaje de bienvenida en Guanajato, el presidente Felipe Calderón evitó hablar de los problemas de violencia que sufre México, pero el Papa se encargó de condenar y luego pedir por el fin del narcotráfico en el país.
En las calles miles de fieles saludaron al Papa en su papamóvil. Hoy se reunirá en privado con el presidente Calderón y además expresará un mensaje especialmente dedicado a los niños mexicanos en la plaza de la Paz de Guanajuato.
Pero antes de llegar al país azteca, el Papa habló con la prensa en el avión que lo trajo a América. Ahí aseguró que el comunismo ya no se puede concebir tal como nació. El gobierno cubano le aseguró al papa que encontrará a un pueblo solidario y trabajador que lo espera con respeto.
Benedicto XVI también destacó la labor de la Iglesia católica en Cuba como intermediaria con el gobierno. Este lunes, el Papa llegará a la Habana donde realizará una misa con ocasión de los 400 años del hallazgo de la imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre.
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