Kanye West fue sentenciado, en el tribunal de Los Angeles, a cumplir con 24 meses de libertad condicional, en los que deberá aprender a controlar su ira con 24 sesiones de terapia, además de completar 250 horas de servicios sociales.
El incidente en cuestión ocurrió en 2013, luego de que West perdiera la paciencia con el fotógrafo Daniel Ramos, quien señaló en el juicio que el futuro esposo de Kim Kardashian debería ir a la cárcel por el trauma que le causó.
El artista ganador de varios premios Grammy también deberá pagar por los daños al equipo del fotógrafo y las facturas médicas que éste presente.
El rapero ha expresado en varias ocasiones su desprecio por las actitudes de los paparazzi y ha confesado que lo hacen sentir como un animal de zoológico.
