Usarlo cuesta 22 millones de pesos por día, puede llegar hasta los cuatro kilómetros y medio de profundidad para escanear el fondo marino y no ha encontrado nada. Muchos dirían que el uso de drones sub acuáticos no ha dado frutos en la búsqueda del MH370, perdido en marzo en el océano índico entre Kuala Lumpur y Beijing, pero los rescatistas quieren demostrar lo contrario.
El Bluefin-21, hasta ahora responsable de escanear el fondo marino donde se sospecha podría estar parte del fuselaje o las cajas negras del MH370, recibirá ayuda de dos nuevos y más modernos drones de acá a uno o dos meses, según reportó la CNN. ¿A qué se debe esto? El drone en uso no puede ir más allá de los 4.5 kilómetros de profundidad y, según las sospechas, los restos del avión siniestrado estarían a mayor profundidad que esa.
El drone en uso es un submarino amarillo de 4.8 metros de largo y 53 centímetros de diámetro (pesa más de 700 kilos). Mira cómo opera en el siguiente video:
