Una firma de moda y cosméticos de Corea del Sur generó controversia al lanzar al mercado una máscara facial en cuyo envoltorio se ve la cara del líder de Corea del Norte, Kim Jong-un.
La empresa asegura que desde junio pasado ya ha vendido más de 25.000 "máscaras nucleares humidificadoras para la unificación".
Sin embargo, muchas tiendas de Corea del Sur suspendieron las ventas del producto de belleza ante el rechazo del público y las preocupaciones sobre la legalidad de las mascarillas.
En Corea del Sur es ilegal hablar a favor del gobierno de Corea del Norte, aunque la ley rara vez se aplica.
Pyongyang y Seúl aún están técnicamente en guerra, pero los líderes de ambos países asistieron a negociaciones este año en torno a una desnuclearización de la península que comparten.
"Agenda política"
Las llamadas "máscaras nucleares" fueron creadas por la firma 5149, una compañía de moda y cosméticos de Corea del Sur.
Los folletos publicitarios del producto dicen que contiene agua mineral del monte Paektu.
En la mitología coreana, el volcán sagrado es el lugar de nacimiento de Dangun, fundador del primer reino coreano hace más de 4.000 años.
En una entrevista con el diario The New York Times, la directora de 5149, Kwak Hyeon-ju, dijo que quería que las máscaras celebraran las "inéditas" cumbres coreanas que se realizaron a principios de este año.
Docenas de coreanos publicaron selfies en las redes sociales con las máscaras, que cuestan unos 4.000 wones (US$3.50).
Pero varias tiendas retiraron las mascarillas de sus estantes tras el rechazo de los medios locales.
"Agenda política"
"Personalmente, no me gustan los productos que promocionan una determinada agenda política", dijo Irene Kim, experta en cuidado de la piel de Corea del Sur al periódico South China Morning Post.
"Hace unos años, Corea del Norte era la mayor amenaza para nuestro país... Kim Jong-un era visto como un tirano que no se detendría ante nada para interrumpir la paz mundial. Ahora se ha convertido en el rostro de una máscara facial popular", añadió.
Kim gobierna Corea del Norte desde la muerte de su padre Kim Jong-il en 2011.
El régimen comunista del país fue criticado por la ONU y grupos de derechos humanos por "violaciones sistemáticas, generalizadas y graves a los derechos humanos".
