Perú superó el jueves los 340.000 casos de coronavirus en medio de un proceso de desconfinamiento, pero el presidente Martín Vizcarra descartó que sea necesario reimplantar la cuarentena nacional, levantada hace dos semanas.
Los contagios subieron a 341.586, según el balance del Ministerio de Salud, con 3.862 nuevos casos, el mayor incremento diario en 21 días.
Por su parte, el número de muertos se elevó a 12.615, con 198 nuevos decesos, el mayor aumento diario en un mes, y los hospitales alcanzaron un nuevo récord de 12.396 pacientes con COVID-19, según el balance.
"Yo no veo en función de la estadística e información científica que recibo que estemos en una situación para más adelante regresar a una cuarentena", declaró Vizcarra a la radio Americana de Moquegua, la región sureña donde emergió como político.
"La cuarentena nos ha enseñado a ser responsables. Todos tenemos distancia social, vemos que hay una conciencia cívica, ese tipo de comportamiento es lo que va a evitar pensar en una futura cuarentena", agregó.
Vizcarra puso fin el 1 de julio al confinamiento obligatorio en 18 de las 25 regiones del país y el miércoles autorizó la reanudación del transporte nacional aéreo y terrestre de pasajeros.
Con el desconfinamiento, el mandatario busca un equilibrio entre la salud y el desempeño de la economía, que se halla en cuidados intensivos tras caer 13,1% en el primer cuatrimestre, y 32,75% en mayo.
Vizcarra señaló que su gobierno seguirá haciendo mejoras en los servicios sanitarios, pero advirtió que el temido virus no desaparecerá.
"La enfermedad nos ha enseñado que este virus va a atacar a todos, que nadie se va a salvar. Unos más temprano, otros más tarde, pero nadie se va a salvar", afirmó.
Con 33 millones de habitantes, Perú es el segundo país con más casos de coronavirus en América Latina, detrás de Brasil, y el tercero en muertes, después del gigante sudamericano y México.
