AFP
La bolsa de Tokio cerró este jueves con una fuerte caída de 3,05%, después de que el Banco de Japón se abstuviera de modificar su programa de compra de activos, lo que acentuó el alza del yen, perjudicial para las empresas exportadoras.
Al término de las operaciones, el índice Nikkei 225 de los principales valores se dejó 485,44 puntos, y concluyó en 15.434,14 unidades.
En su reunión de política monetaria, que duró dos días (miércoles y jueves), el Banco de Japón optó por la prudencia a una semana del referendo que decidirá si el Reino Unido continúa en la Unión Europea. Así, mantuvo en 80 billones de yenes (unos 745.000 millones de dólares) su programa de compra de activos destinado a estimular la economía nipona, y en -0,1% su tasa directriz.
El mercado esperaba mayoritariamente que se mantuviera el statu quo, aunque 11 de los 40 economistas interrogados por la agencia Bloomberg pronosticaban un mayor esfuerzo de estímulo por parte del instituto emisor, que habría diluido el valor del yen.
Ante la decisión del banco central, el yen se revalorizó con fuerza, un movimiento que castiga las perspectivas de las empresas exportadoras, muy presentes en el Nikkei 225.
Así, el dólar cayó rápidamente a 104,01 yenes, antes de subir ligeramente para cerrar a 104,10 yenes. Son los niveles más bajos desde septiembre de 2014.
En el bajo nivel del dólar influye también la decisión de la Reserva Federal estadounidense de no elevar por el momento sus tasas de interés, por prudencia antes del referendo británico.
El euro caía igualmente respecto a la divisa nipona, en torno a 117,30 yenes, frente a 118,95 yenes la víspera, su nivel más bajo en casi tres años y medio.
El Banco de Japón prefiere "guardarse algunos cartuchos" ante la posibilidad de un Brexit, anticiparon los analistas de Natixis, destacando que "una salida (del Reino Unido) de la UE intensificaría las incertidumbres económicas".
En su comunicado, el instituto emisor no cita explícitamente la cuestión del Brexit, sino que se limita a plantear las perspectivas que pesan sobre la coyuntura europea y los "riesgos geopolíticos".
"El Banco de Japón está metido en un buen lío", comentó en una nota Chris Weston, analista de IG.
"Le interesa mucho que ganen los partidarios de seguir en la UE, porque de lo contrario el cambio dólar-yen caerá probablemente por debajo de los 100 yenes por un dólar, y entonces el Banco de Japón tendrá que hacer algo increíble para estabilizar las divisas", añadió.
El alza del yen se ve reforzada por tratarse de un valor refugio, que los inversores privilegian en tiempos de incertidumbre.
