Cargando cajas con las fichas de los militantes necesarios para que Revolución Democrática inscriba las primarias legales del Frente Amplio llegó este miércoles al Servicio Electoral Beatriz Sánchez, acompañada de los diputados Giorgio Jackson (Revolución Democrática) y Gabriel Boric (Movimiento Autonomista).
La recolección de más de 40 mil firmas no era el único motivo de la periodista para celebrar: el alza de 9 puntos en la encuesta Adimark de abril (que la dejó con 11%) contrastó con la crisis desatada en la Nueva Mayoría tras la decisión de la DC de ir a primera vuelta y decretar, en teoría, el fin de la Nueva Mayoría.
Cumplida la meta del fichaje, mientras la periodista y su equipo saldrán ahora en busca de un electorado más transversal -pero sin perder la identidad- y a ampliar el nivel de conocimiento de Sánchez como candidata, sus rivales ya la mencionan y se le apunta como una amenaza concreta a las aspiraciones oficialistas.
¿Cómo se gesta el vínculo entre el Frente Amplio y Beatriz Sánchez? ¿Cuál es su equipo de trabajo? ¿Cuándo y cómo aceptar ser candidata? Aquí algunos episodios que dan cuenta de cómo se construye esta candidatura.
Una aliada en pantalla
La complicidad entre la precandidata Beatriz Sánchez, Revolución Democrática (RD) y el Movimiento Autonomista (MA) -los dos referentes más visibles del Frente Amplio- no es nueva. Para entenderla, hay que remontarse a 2011, cuando la periodista ya era observada por los entonces líderes del movimiento estudiantil.
Desde su tribuna radial (ADN) y televisiva (La Red), en las que solía emitir opiniones al final de algunas de las noticias que presentaba en su calidad de conductora, Sánchez era considerada por los entonces rostros de los movimientos sociales como una "defensora" de causas como el derecho a la educación, a la salud y a la manifestación.
Uno de tantos ejemplos se dio en el noticiero "Hora 20" de La Red, el 27 de septiembre de 2012. Ese día se registró una nueva marcha estudiantil -con Camila Vallejo y Gabriel Boric como líderes estudiantiles- y, tras la emisión de la noticia, Sánchez habló de "ojalá siempre nos quedáramos solo con esa visión, la de las marchas, las demandas, la de la facultad o derecho que tenemos todos de salir a las calles a manifestarnos", e hizo una clara distinción respecto de quienes llegaron a la manifestación a hacer desmanes.
Ese mismo año y en esa misma tribuna, la periodista emplazó al entonces ministro del Interior, Andrés Chadwick, respecto de la responsabilidad del gobierno de Sebastián Piñera en el "quiebre" del diálogo entre los movimientos y la administración vigente.
Seis años después, y con Beatriz Sánchez como la más clara carta presidencial del Frente Amplio, desde este conglomerado reconocen que ya en ese periodo veían en ella una "aliada espontánea" de sus causas y a una "periodista sencilla, pero con opinión clara". En definitiva, una caja de resonancia en la que el "malestar" que ellos sentían interpretar encontraba eco.
Jackson y Boric: los arquitectos
Si bien Sánchez fue una opción para algunos de los líderes del Frente Amplio, no fue la única carta presidencial en la que pensó este conglomerado.
Durante 2016 otros nombres también ocuparon espacio en el debate interno: los rectores Aldo Valle (U. de Valparaíso) y Ennio Vivaldi (U. de Chile), el académico Carlos Ruiz, el sociólogo Alberto Mayol, los militantes de RD Sebastián Depolo y Claudia Sanhueza, y los dirigentes sociales Luis Mesina (No+ AFP) y Cristián Cuevas. Todos fueron evaluados como posibles abanderados. Incluso, en algunos sectores de RD recuerdan haber pensado en Benito Baranda, sin concretar gestiones, según reconocen.
Con todo, Giorgio Jackson y Gabriel Boric -RD y MA- no fueron los primeros en contactar formalmente a Sánchez para que asumiera una candidatura por el sector. En el registro se encuentra una primera gestión por parte de otro partido del Frente Amplio -Poder-, cuya presidenta, Karina Oliva, habló por teléfono con la periodista en enero de este año, pero no tuvo éxito en la tratativa.
En marzo, Jackson y Boric volvieron a la carga. Tras distintos contactos, hoy se sindica como una fecha clave el miércoles 15 de ese mes, día en que la periodista se abrió a "evaluar" la oferta, en una reunión que sostuvo con los diputados y con la dirigenta del MA Patricia Araya, en dependencias de la Radio La Clave, en Providencia.
Las tratativas surtieron efecto. Cuatro días después, el domingo 19, Sánchez les comunicó a Jackson y Boric que se embarcaría como precandidata y, el 21 de ese mismo mes, renunció al aire en el programa que tenía en Radio La Clave.
Según comentan fuentes del Frente Amplio, una de las barreras que los diputados tuvieron que sortear fueron los "costos" profesionales que la periodista manifestó como trabas antes de aceptar la propuesta. Según comentan, argumentaron usando sus propios ejemplos, pues el salto que ambos dieron desde los movimientos sociales al stablishment político le valieron críticas desde sus ex pares.
Otro de los argumentos esgrimidos en esas reuniones, y del que Sánchez dio cuenta cuando anunció sus planes en forma pública, apuntó a la posibilidad de que los mismos cambios que demandaba, podía impulsarlos desde lo institucional.
En paralelo a las conversaciones que tuvo con los dirigentes, la periodista lo reflexionó con su familia y amigos, entre quienes encontró apoyo. En conversación con T13 Semanal, Sánchez sostiene que su distancia inicial con la propuesta le "empezó a hacer ruido, porque yo siempre llamaba a involucrarse, y eso estaba ahí instalado, hasta que fue lo que terminó predominando en la decisión que tomé: salir de la zona de confort, donde yo estaba muy cómoda haciendo mi pega, para convertirme en precandidata presidencial".
Validación interna
En un conglomerado político que asegura que sus decisiones se toman "desde las bases", en forma colectiva y que rechaza los individualismos, la candidatura de Beatriz Sánchez no podía aparecer como una imposición de dos de sus rostros más importantes, como Boric y Jackson.
Fue así que ambos se vieron en la obligación de someter su nombre a un plebiscito electrónico entre los militantes y adherentes formales de RD y MA. Si bien la convocatoria apenas superó el 25% de los habilitados, entre quienes participaron en la votación Sánchez obtuvo una amplia mayoría.
La secretaria general del MA, Constanza Schönhaut destaca que Sánchez "llevaba mucho tiempo siendo vocera de distintas experiencias de lucha". La dirigente agrega que su legitimación en el plebiscito interno fue coherente con las reivindicaciones que siempre representó la periodista, como "ciudadana, feminista y comprometida con un proyecto colectivo".
Convertida ya en precandidata -junto con Alberto Mayol- el siguiente paso fue apostar por algo más ambicioso: reunir firmas para inscribir ambas candidaturas y poder someterse así a primarias legales. Con ello no sólo marcaban una diferencia con la Nueva Mayoría -sector al que pretenden superar y que no tendrá comicios el 2 de julio-, sino que aseguran presencia televisiva (con la franja, al igual que Chile Vamos) y pueden cargar hasta un 10% de gastos de cara a la elección presidencial de noviembre con cargo al fisco.
¿Quién integra su equipo?
Después de que Sánchez aceptó la propuesta de RD y el MA se conformó el "primer equipo" de la precampaña que buscó principalmente asegurar la inscripción de las primarias del Frente Amplio.
El coordinador general del grupo es el ex presidente de RD Sebastián Depolo, quien habitualmente la acompaña en el día a día. A él se suman el profesor de la Universidad de Los Lagos Carlos Durán, como coordinador del consejo político y social, y Patricia Araya, como coordinadora operativa de los equipos ejecutivos en proceso de formación: finanzas, legal, territorial y voluntarios, comunicaciones y contenidos.
En contenidos la apoyan los economistas Claudia Sanhueza (militante de RD y ex integrante del equipo programático de Michelle Bachelet) y Nicolás Grau (economista, ex presidente de la Fech e hijo de Paulina Veloso, ex ministra de Bachelet y actual consejera del CDE), mientras que en comunicaciones se apoya en las periodistas Lissette Fossa y Alejandra Lazo (jefa de comunicaciones de Jackson).
Equipos que, asegura la propia Sánchez a T13 Semanal, se van a ir engrosando: "Vamos a ir trabajando más, seguramente van a ir creciendo las personas que trabajan en la precandidatura, pero esto tiene etapas y la próxima es la primaria".
Ampliar apoyos: difícil tarea
Desde el sector adelantan que tras la inscripción y validación de las primarias ante el Servel, comenzará una "nueva etapa" en la carrera de Sánchez a La Moneda, la que no solo estará marcada por la campaña legal frente a Mayol, sino por el intento de ampliar la base de apoyo de Sánchez más allá del electorado de izquierda. "Va a hablarle a la ciudadanía, más allá de los convencidos", resume una fuente del sector.
Esta meta asoma compleja, no solo porque matizar su discurso podría poner en riesgo el apoyo de un elector de izquierda que podría no encontrar grandes diferencias con una de las cartas oficialistas como Alejandro Guillier, sino porque en el proceso puede generar tensión al interior del Frente Amplio.
De hecho, la comunicadora ya fue instada a apoyar ciertos compromisos para asegurar tanto el apoyo de Izquierda Autónoma (IA) como del Partido Liberal, ambos integrantes del Frente, con visiones que no siempre comulgan.
Así, mientras el diputado Vlado Mirosevic (Partido Liberal) apuntó el martes a que la candidatura del FA incorpore entre sus prioridades "crecimiento económico, el emprendimiento y la innovación social", rechazando que se le "regale esa agenda a la derecha”, la Izquierda Autónoma sólo expresó su apoyo a Sánchez después de que la se comprometiera con ejes como los derechos sociales universales, un nuevo régimen de relaciones laborales, derechos sexuales y reproductivos, redignificar la docencia y verdad, justicia y memoria.
