En medio de una reunión de Régimen Interno de la Cámara, los diputados analizaron aumentar las fiscalizaciones al sistema de asesorías externas. Esto, tomando en cuenta además que actualmente cada legislador cuenta con $ 2,5 millones mensuales para contratar a expertos, estudios o encuestas. Sin embargo, gran parte del dinero se destinaría para emplear a personal que cumple labores de oficina de los parlamentarios.

La información fue confirmada esta mañana por La Tercera, donde se asegura que los parlamentarios habrían acordado realizar una auditoría con los organismos encargados del Congreso. 

Pero, según señala el medio escrito, algunos diputados plantearon “ir más allá y proponen reestructurar las asesorías para restringir y reorientar el uso de dineros destinados para esta área”, indican.

Este ítem hoy es financiado con recursos fiscales, o sea, asignaciones parlamentarias que entrega el Congreso a los distintos legisladores.

Según confirman, hoy parte del dinero se destina para emplear a personal de oficina -profesionales y técnicos- de los diputados, lo que no se traduce necesariamente en estudios o informes de “expertos”.

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