En Quito el canciller Ricardo Patiño, reveló que todos los intentos por evitar que Suecia pueda extraditar a Assange rumbo a Estados Unidos, debido a las filtraciones de Wikileaks, fueron infructuosos.

El Secretario de Estado, además revelo antecedentes según los cuales la amenaza inglesa de entrar a la fuerza a la embajada ecuatoriana para detenerlo, son contrarias al derecho intencional.

Patiño agregó que Assange podría ser víctima a una "persecución política" y calificó el derecho de asilo como parte de los derechos humanos y fundamentales.

Londres afirmó que no concederá salvoconducto a Assange, quien permanece en la embajada, por lo que ahora debe seguir un periodo de negociaciones entre Londres y Quito para definir su futuro.

La extradición fue concedida a Suecia por cargos de índole sexual.
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