El contacto se concretó a través del personal de la embajada de Estados Unidos en Buenos Aires, según señaló el portavoz adjunto del Departamento de Estado, Mark Toner.

"Este tipo de acciones pueden afectar de forma adversa el clima de inversión para los negocios estadounidenses, para otros negocios, y para las compañías de otros países", dijo Toner.

Este jueves el ministro español de Exteriores, José Manuel García-Margallo, dialogó en Bruselas sobre este caso con la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, quien le manifestó el rechazo de Washington a la medida adoptada por Argentina.

Posterior al encuentro, García-Margallo habló con los medios y aseguró que Clinton le entregó su apoyo para colaborar conjuntamente a nivel internacional, con la intención de convencer al Gobierno argentino a no seguir adelante con su decisión.

Según el ministro hispano, Clinton dijo que la nacionalización de YPF es una "violación" del derecho internacional y una medida "perjudicial" para el Gobierno argentino.

El miércoles Toner sostuvo que la decisión del vecino país "crea un clima de inversión muy negativo" e instó al país a "normalizar sus relaciones con la comunidad financiera internacional".
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