Los arquitectos Luis María Calvo y Silvio Mendes Zanchetti, quienes se encuentran en la ciudad para evaluar la conservación de ésta como Patrimonio de la Humanidad, fueron las víctimas del asalto.
De acuerdo a las primeras informaciones, el hecho ocurrió en un momento en que los expertos se encontraban sin sus escoltas policiales y fuera de su itinerario como representantes de la Unesco.
A raíz del asalto, Calvo Y Mendes perdieron un disco duro, dos cámaras fotográficas y una suma de dinero que ascendería a los 82 mil pesos.
Más allá de la pérdida material, la principal complicación que provoca el delito es la pérdida del material que los especialistas habían recopilado en los artículos que les fueron arrebatados por los delincuentes.
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